Estados Unidos.- 9 minutos es el tiempo de duración que tiene el audio donde el dueño de los Clippers de Los Ángeles, Donald Sterling, se expresa de forma racista en contra de las personas de raza negra; sin embargo fue tiempo más que suficiente para derrumbar completamente un imperio que llevaba construyendo por exactamente 32 años, 10 meses y 13 días.
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Este martes el comisionado de la NBA, David Silver, concluyó que la voz en el audio revelado hace un par de días por el portal TMZ pertenece a Donald Sterling, razón por la que a partir de este momento el empresario está vetado de por vida de la NBA y no podrá asistir a ningún partido o práctica de ningún equipo de la liga, del mismo modo se le prohibió participar en cualquier decisión concerniente a la franquicia.
Si bien la suspensión no obliga a Sterling a vender la franquicia, Silver indicó que tratará de forzar una venta del equipo, solución que parece la más factible para el empresario toda vez que 12 marcas han abandonado a los Clippers y se espera que otras tantas se sumen una vez dada a conocer la resolución.
Asimismo parece poco probable que muchas marcas se muestren deseosas de concretar nuevos negocios con un hombre encontrado culpable de prácticas racistas, pues esto sería prácticamente un suicidio mercadológico.
Por si fuera poco le NBA impuso al aún propietario de los Clippers una multa de 2.5 millones de dólares, que de acuerdo con el periodista estadounidense Darren Rovell, especializado en finanzas deportivas, es como si un estadounidense promedio fuera multado con 55.40 dólares.
Pese a todo, podemos decir que en realidad la venta del equipo no será una pérdida para Sterling, pues de acuerdo con el último ranking de la revista Forbes la franquicia está valuada en 575 millones de dólares, 562,5 millones de dólares más de lo que le costó en 1981.
Sin lugar a dudas Sterling recordará esos 9 minutos por el resto de su vida.