Ha sido muy grato convivir con especialistas en diversas ramas de la mercadotecnia durante estos últimos años. En este tiempo, a través de preguntas y comentarios recibidos en conferencias, diplomados y en esta columna, he aprendido a sensibilizarme sobre las muchas necesidades e inquietudes que tiene esta área. Me ha tocado viajar a eventos y para dar clases en diversos estados del país, y en todos lados la constante es la misma: hay hambre de aprender los aspectos legales que impactan a la mercadotecnia y a las actuaciones cotidianas que tenemos en redes sociales. Por ello he decidido compartirles solamente 5 deseos legales para este año que pronto comienza.
1. CONOCE EL MARCO LEGAL DE LA MERCADOTECNIA. Todo lo que haces tiene impactos legales de muy diversa índole, que pueden afectar no sólo a tu agencia o empresa, sino a tu cliente. Es importante que te capacites en al menos las siguientes áreas: propiedad intelectual (marcas y derechos de autor), protección de datos personales, protección al consumidor (publicidad y promociones), juegos y sorteos.
2. ESTUDIA EL MARCO REGULATORIO DE INTERNET. Existen muchos mitos sobre lo que se puede y lo que no se puede hacer en internet. Peor aún, la mayoría de la gente suele pensar (erróneamente) que todo se puede hacer en Internet porque no está regulado, y no hay nada más alejado de la realidad. Tanto en México como en el mundo hay una vasta legislación que regula diversos aspectos legales del Internet y de las tecnologías de información. Es importante que conozcas el marco legal de internet para evitarte sorpresas no deseadas. Particularmente en México están regulados: los delitos informáticos, el comercio electrónico, los negocios electrónicos, la firma electrónica, los nombres de dominio, la protección de datos personales en la nube, e inclusive algunos aspectos de la mercadotecnia en línea.
3. DOMINA LA NORMATIVIDAD DE LAS REDES SOCIALES. Por si todo lo anterior fuera poco, las redes sociales también cuentan con sus propias reglas, que suelen traducirse en “términos y condiciones de uso”, “políticas de privacidad”, “políticas de uso de marcas”, “reglas de promociones”, entre otros muchos documentos. Cosas tan simples como usar los “me gusta” de Facebook en una foto para determinar el ganador de un concurso, o “hazte fan de nuestra página en Facebook para participar en nuestra promoción” están prohibidas.
4. IGNORA TODO CONSEJO LEGAL QUE NO PROVENGA DE UN ABOGADO ESPECIALISTA. En reiteradas ocasiones he escuchado en cursos o conferencias cosas como “es que el conferencista anterior (no abogado) nos dijo lo contrario”, “mi abogado (el que divorció a tu hermano o te fue a amparar cuando caíste en El Torito) me dijo otra cosa”, etc. Recuerda que los abogados somos en cierta medida como los médicos, tenemos muchas especialidades. El abogado de tu empresa o de la familia es casi seguro que no tenga la más remota idea de lo que le estás preguntando, pero por querer quedar bien seguro te dará una respuesta. Peor tantito si el consejo (legal) viene de un gurú de marketing. Mis respetos para ellos, saben mucho de marketing pero no de derecho (incluyendo a los “abogados” descarriados que dejaron la profesión para convertirse en especialistas en mercadotecnia). Cuando alguien no especialista te quiera dar un consejo legal pregúntale lo siguiente: si algo sale mal, tu me vas a defender o a sacar del problema?
5. EN TODO EMPRENDIMIENTO, ACÉRCATE A UN ABOGADO EXPERTO EN LA MATERIA. No importa si se trata del proceso de creación de una marca o el lanzamiento de una campaña de marketing digital, siempre será preferible trabajar desde el inicio con tu abogado de confianza para evitar sinsabores, multas, impedimentos u otros problemas legales. Si consultas al abogado al final, tal vez tengas que volver a comenzar desde cero y eso no le va a gustar a tu cliente ni a tu jefe.