Santiago, Chile.- En el dĆa de ayer, tuve la suerte de compartir mi experiencia en redes sociales, con parte de los asistentes al Congreso Anual que realiza la Red Argentina de Salud. El pĆŗblico, mĆ©dicos y especialistas, en su mayorĆa migrantes digitales recibió con respeto un tema que, yo creĆ, no debĆa interesarle demasiado. Por fortuna, me equivoquĆ©.
Sin saber quĆ© esperar, asistió un grupo numeroso de profesionales que, si bien tienen conocimiento de redes sociales en el Ć”mbito personal, probablemente hasta ayer no habĆa pensando en ellas como una herramienta de marketing digital.
Uno de los puntos altos, sin duda, fue la presentación de un video que tiene ya un par de aƱos y que fue gestado en ese paĆs, sobre el conocimiento que traen consigo los chicos nacidos en la era de las nuevas tecnologĆas. Claro, tal como nos ha pasado a la mayorĆa de quienes nacimos antes del aƱo 1990- fecha que, segĆŗn Marc Prensky, marca el antes y el despuĆ©s de las nuevas tecnologĆas- la audiencia se sintió identificada con situaciones cotidianas, haciĆ©ndola pensar en la importancia de no āquedarse atrĆ”sā en tĆ©rminos comunicacionales.
Sucede que, quienes, de una u otra forma, estamos inmersos en este apasionante mundo de las nuevas tecnologĆas, nos olvidamos a diario que son muchos mĆ”s los que no lo estĆ”n y que, a pesar de que una población mayor a los habitantes de toda Europa, es decir 819 millones de personas, segĆŗn cifras de la misma empresa, Ā entran Ā cada dĆa solamente al sitio web de Facebook, el resto del mundo ignora Ć©sta y otras redes sociales.
Ya sea por desconocimiento, falta de interĆ©s o miedo, gran parte de la población mundial se encuentra al margen de las redes sociales y resulta todo un tema darnos cuenta de que la integración a las nuevas tecnologĆas, de ese grupo, depende de nosotros.
El aƱo pasado, una información generada por las Naciones Unidas para la población (UNFPA) seƱalaba que a mediados de este siglo, un cuarto de los habitantes del planeta serĆ” mayor de 60 aƱos, lo que implica que ese grupo, que sigue siendo no sólo Ćŗtil sino fundamental para la economĆa, la cultura y la educación de las próximas generaciones, podrĆa comenzar un proceso de aislamiento digital, si no los integramos hoy.
Dicha situación, no sólo serĆa nefasta para el comercio y el marketing, sino para el ser humano en particular. Por ello es necesario comenzar a motivar a quienes aĆŗn no se atreven a ingresar al mundo digital, mostrĆ”ndoles sus bondades, explicĆ”ndole sus peligros , abriendo una ventana para su propio desarrollo personal y emocional, por medio de las nuevas tecnologĆas. Sólo asĆ podremos llegar a una mayor cantidad de gente con nuestras propuestas y proyectos, para mejorar su vida y la del mundo. Ā La integración digital es una responsabilidad que nos compete y por tanto, es tarea de todos. ĀæHas pensado en enseƱar a navegar a tu abuela?
Este es el video. Cabe seƱalar que en la audiencia habĆa un mĆnimo de abuelos. El resto eran padres o madres que no intentaban mantenerse al margen de la tendencia.