Santiago, Chile.- Quienes aún no usan las redes sociales como herramienta de marketing para sus negocios, no alcanzan a visualizar el efecto que ellas pueden tener. Y es comprensible, no se ama lo que no se conoce. Por lo mismo, antes de comenzar a trabajar en redes sociales con una empresa, es necesario aclarar que el tema no es un juego, que es un trabajo y que, a estas alturas del partido, el que lo realiza tiene “algo” de experiencia en el rubro.

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Junto con lo anterior, una vez explicadas las bases- que incluyen puntos elementales que el directorio debe conocer- resulta esencial hacer comprender a quien corresponda, el valor de tu tiempo en redes sociales. Sí, porque en la mayoría de los países de Latinoamérica, poco se pondera el trabajo intelectual, salvo que rinda de inmediato y sabemos que en Social Media se requiere tiempo. En cambio, acostumbrados a ver a hijos y sobrinos insertos en comunidades virtuales, a muchos ejecutivos, el tema les parece solo una diversión.

Si estás comenzando un trabajo de marketing digital, asegúrate de dejar claros los siguientes puntos, para que el exceso de expectativas no juegue en  tu contra.

–          Plazos. Hacer comunidad implica tiempo y dedicación (por eso es necesario insistir en el valor de tu tiempo) para conseguir el acercamiento de los clientes y de los potenciales clientes.

–          Resultados. Los resultados son variables. Si bien puedes entregar informes quincenales o mensuales, lo que sucede en Social Media, no siempre se traspasa a resultados esperados (venta inmediata), pero en la medida que el tiempo avanza y se solidifica la relación empresa- comunidad, por medio de las redes, los objetivos se van cumpliendo con más frecuencia.

–          Mantención. La mantención de las cuentas debe ser permanente. Una cuenta no sólo se utiliza para “vender”, sino también para orientar y cumple el rol de atención al cliente, pre y post venta (y requiere tiempo)

–          Contenido. La generación de contenido es una labor intelectual y necesita una estrategia llevada por alguien con criterio. Esto implica manejar los ritmos de publicación, el tipo de contenido, su creación o la búsqueda del mismo, junto con las respuestas a las inquietudes de los usuarios.

Finalmente, el cliente debe comprender a cabalidad que la actividad en redes sociales forma parte de una estrategia de marketing más completa y que es tan importante como las acciones en medios tradicionales. Entendiendo el modelo, estará en condiciones de valorar el trabajo realizado por el equipo o el Community Manager.