Cannes, Francia.- Se acaba la gran fiesta de la publicidad mundial en el día de hoy. Los ganadores se llevan los trofeos a casa; los demás se llevan la emoción, la experiencia y el aprendizaje. Porque compartir con creativos de todos los continentes sugiere intercambiar ideas, conceptos, tips de cultura y pasar un buen rato descubriendo a los seres humanos que hay tras la creación.
El movimiento, la ansiedad, las ideas y las personas se llenan de energía durante siete días, todos sacan algo positivo del encuentro. Esto va más allá de la percepción, las cifras hablan. Si en 1954 fueron 130 delegados los primeros en asistir al encuentro; este año, el número asciende a 12.000 aproximadamente.
Sin duda que en estos años ha habido mucha evolución, tal como lo señala la infografía de otra nota nuestra, pero por sobre todo ha crecido el interés del mundo por esta instancia que sigue siendo única para la industria, precisamente por la convocatoria que tiene.
“No me he perdido Cannes durante 20 años” dice Tony Granger, presidente del jurado que premió a nuestras agencias en Outdoors. “Es una inyección de 10 megatones de adrenalina creativa. Cada año corro a casa para aplicar lo que he aprendido. Y cada año me siento más emocionado y deleitado al descubrir de lo que nuestra industria es capaz de alcanzar”
Otro de los jurados coincide asegurando que en Cannes “No hay lugar para la indiferencia”
Marcello Serpas (AlmaBBDO Brasil) señaló en sus palabras de bienvenida “Ya viene Cannes. Esta es la frase que hemos escuchado frecuentemente en las agencias alrededor del mundo durante los últimos 60 años. Es una frase corta, pero está llena de significados y emociones. Ansiedad, expectación, esperanza, miedo, felicidad…Puedes encontrar todo tipo de sentimientos aquí, a excepción de uno: indiferencia. La indiferencia no tiene lugar en Cannes”
Claro, es imposible. En el planeta de la creatividad, aún cuando se haya perdido la inocencia en términos profesionales, la capacidad de asombro se recupera rápidamente y la adrenalina que trae el descubrimiento siempre nos dejará con ganas de más. Todo lo bueno se termina, pero, por fortuna, nos llevamos un gran baúl de conocimiento y podemos decir: “Hasta la próxima, nos vemos en Cannes Lions2014”