Este mes fue de reparto de utilidades. Y los principales en hacer “agosto” con los que recibieron esta prestación fueron las instituciones bancarias.
Los anuncios de bancos no suelen tener el impacto de un jabón, agua purificada, o el lanzamiento de una bebida energética. El target de los bancos suele ser la Población Económicamente Activa (PEA) para que adquieran productos y beneficios al contratar algún servicio de la institución bancaria de su preferencia.
Para el caso de las utilidades, ofrecen fondos de inversión o cuentas de ahorro con alguna tasa preferencial. Si somos bien intencionados, creeríamos que lo hacen para fomentar el ahorro (los mexicanos no ahorramos); y por el otro lado, es fundamentalmente para hacer negocio.
Sea cual sea la razón, los anuncios bancarios son grises y no llaman la atención. Es bastante difícil hacer un anuncio para fomentar que las personas adquieran una tarjeta de crédito, por ejemplo, en el sentido de lo que realmente es, un préstamo inmediato; no una extensión del sueldo a fondo perdido (para la mayoría).
Revise muy bien las especificaciones de contrato y la tasa que va a recibir, si decide ahorrar; si compra algún producto o servicio, que sea en beneficio de su familia, o propio.
Al final, lo bailado, nadie se lo quita.