Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, que se llevaron a cabo un año después (y sin espectadores) por la pandemia, se ven envueltos en una gran polémica relacionada con la publicidad y los patrocinios.
Así es, el gigante de la comunicación Dentsu y otras cinco empresas niponas fueron acusadas de manipulación de las licitaciones de los patrocinios, un escándalo del que habla todo Japón.
La medida de los fiscales japoneses contra el gigante de las relaciones públicas es uno de los puntos más que analizan las autoridades para poder llegar al fondo del asunto de una compleja red de irregularidades previas a los JJ.OO de Tokio.
Entre las empresas involucradas, además de Dentsu –que tiene un exdirectivo acusado de soborno–, están el fabricante de trajes más famoso de Japón, el presidente de un gigante editorial y máximo referente de una compañía que fabrica juguetes para mascotas.
Pero el mayor involucrado en la denuncia es, sin duda, Dentsu, ya que se trata de una multinacional considerada como una de las instituciones más fuerte de Japón.
El gigante de la publicidad y las relaciones públicas tiene en su portfolio a las más grandes corporaciones japoneas, además de estar estrechamente ligada al gobernante Partido Liberal Democrático.
De hecho, tiene al gobierno entre sus clientes.
Qué pasó con Dentsu, el gigante de la publicidad de Japón
Dentsu estuvo involucrada en todo el proceso, desde la presentación de Tokio como sede hasta la decisión de quiénes serían las empresas que patrocinaron los Juegos de Tokio 2020.
En esa lista hay bancos, compañías de bienes raíces, petroleras y tecnológicas. Se calcula que Dentsu decidió sobre patrocinios por 3 mil millones de dólares
En un comunicado difundido este martes 28 de febrero, los fiscales de Tokio alegan que Dentsu, junto con su mayor rival publicitario nacional, Hakuhodo, la agencia de publicidad Tokyu, dos compañías organizadoras de eventos (Cerespo y Same-Two), y un holdin productor de TV (Fuji Creative), violaron las normativas antimonopolio restringiendo el ingreso a otras firmas a los patrocinios de los JJ.OO de Tokio 2020.
Luego de la acusación, Dentsu comunicó que cinco de sus ejecutivos y de sus subsidiarias devolverán su salario. Además, que va a crear un comité de investigación con expertos externos para analizar lo sucedido.
Según publica Financial Times, citando a personas cercanas a Dentsu, es muy poco probable que la compañía sufra daños significativos en su posición dominante en el mercado de la publicidad en Japón.
“Ninguna empresa importante en Japón puede vivir sin Dentsu”, le dijeron al FT.
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