• En una investigación de Raport food-trendów 2019 se dio con los motivos por los cuales los comensales visitaban un restaurante.

• Dentro del mercado restaurantero, casos en redes sociales que han escalado no solo han sucedido con La Terraza, también con denuncias como la que el chef Edgar Nuñez lanzó contra influencers.

• Dentro de México, el uso de redes sociales ha hecho de las denuncias de mal servicio historias virales.

La Terraza es el restaurante con la “cuenta” más denunciada en redes sociales, pues en diversas ocasiones se ha mostrado los cargos excesivos que hace a las personas que visitan el lugar, sin que hasta ahora la Profeco haya regulado su actividad, pese a las múltiples denuncias que se han interpuesto contra el emprendimiento, que convirtió un “patio de azotea”, como se describe en Google, en uno de los restaurantes más polémicos de la capital del país.

Estas malas acciones en contra de comensales se han vuelto una práctica común en el mercado restaurantero y de hecho hemos visto interesantes casos no solo de denuncias por parte de comensales, sino de parte de los propietarios,  mismos que han llamado la atención, tal como ocurrió con el chef Edgar Nuñez.

Nuñez desató una intensa polémica en redes sociales hace unos meses, cuando en su habitual ejercicio de exponer a influencers que le pedían comer gratis en sus restaurantes a cambio de postear la experiencia en sus redes, una historia escaló, porque obtuvo respuesta de la influencer (la cubana Marta María Santos), argumentándole el por qué, desde su punto de vista, era válido pagar con post.

En su momento el famoso chef aseguró que este tipo de prácticas atentaban contra los negocios y defendió el derecho a cobrar por el servicio que ofrecen los restaurantes y reconocía que las publicaciones en estas plataformas no son moneda de cambio.

Ante estos antecedentes se establecen acciones muy interesantes en el mercado, como las que advierten lo importante que se ha vuelto la experiencia en los locales de alimentos.

20 por ciento por servicio

Lo que parece que comenzó como un emprendimiento con mentalidad de tiburón, al convertir un patio de azotea en el polémico restaurante La Terraza, ha acabado como un mal antecedente para un restaurante con todo tipo de historias de terror. La última la contó la periodista Betzabé Zumaya, cuando mostró la cuenta del lugar en que le cobraron 200 pesos por comer en la terraza que permite tener una vista parcial de la Plancha del Zócalo, mientras que por una orden de tacos les cobraron 420 pesos y 55 pesos por un concepto identificado como servicio de michelada. A usuarios como Ely Lura, le han cobrado cargo por servicio de 20 por ciento, sin que se les alerte a los comensales del cobro por tal cargo.

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Esta historia se ha denunciado en redes y a pesar de que casos como el contado por Zumaya se han presentado, al menos en redes, ante la Profeco, el organismo no ha regularizado el restaurante.

Ante estos casos queda patente el reto que hay en la industria de servicios en México, donde se han consolidado prácticas cada vez más importantes, para poder entender el mercado y no solo eso, innovar ante el consumidor en la manera como este se involucra en el mercado de restaurantes.

Ya vimos que este involucramento, ha llevado a chefs como Nuñez, a defender el derecho que tienen los restaurantes a cobrar y no aceptar las publicaciones en redes como moneda de cambio; también a comensales denunciar malas prácticas, en medio de estas acciones, las redes sociales son el común.

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