Por Luis Miguel Martínez
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Desde una perspectiva sociológica, las películas son artefactos -que conllevan información sobre la cultura de su creador y la audiencia. Así, las películas se consideran una gran forma de arte contemporáneo e incluso un medio para la educación.
Gracias al movimiento beta, es factible aprovechar una deficiencia en nuestro sistema visual para recomponer el movimiento a través de una secuencia de cuadros o fotogramas. Así, cine y fotografía tienen una relación indivisible. De igual forma, sin tecnología -de fotografía, de iluminación, de pre/post producción-, es imposible pensar en hacer cine.
En 1929, se realizó la primer entrega de los reconocimientos de la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas. Sobra recordar que estos reconocimientos se plasman en forma de una estatuilla conocida como Oscar. El éxito de estos “premios” es contundente de forma tal que ha sido copiado por otras industrias como los Grammy (para la música), los Emmy (para la televisión), y los Tony (para el teatro).
Lejos del glamour de la llamada alfombra roja, un grupo de 25 personajes -todos del género masculino- algunos en smoking, otros en traje negro, otros sin uno ni el otro, como recién salidos de un laboratorio de ingeniería, recibieron un reconocimiento a la tecnología e ingeniería que han creado para hacer películas más realistas, con efectos que superan con creces a los anteriores y con nuevas técnicas que facilitan la realización cinematográfica. Estos científicos e ingenieros reciben una medalla, diploma, placa o el preciado Oscar, todos ellos los Reconocimientos a la Ciencia y a la Ingeniería de la Academia.
La medalla John A. Bonner se le otorga a quien se ha dedicado de forma sobresaliente a mantener los “altos estándares”, este año la recibió Bill Taylor de quien ha supervisado más de 200 películas y quien se define a si mismo como un “mago amateur”. J.P. Lewis, Matt Cordner and Nickson Fong, recibieron el reconocimiento del logro técnico por la técnica de deformación de la pose (PSD). Gracias a estas técnicas es factible controlar desde una computadora los gestos en los personajes digitales en las películas, como se muestra en la imagen.
Gracias al trabajo de Theodore Kim, Nils Thuerey, Dr. Markus Gross y Doug James, todos científicos de cómputo, gracias a un algortimo para las rutinas de cómputo que han permitido generar digitalmente humo y otros fluídos en peliculas como “Avatar,” “Monsters vs. Aliens,” “Sherlock Holmes,” “Transformers: Revenge of the Fallen,” “Hugo,” “The A Team,” y “Green Lantern,” entre otras.
Richard Mall, a su vez, recibió un reconocimiento por el diseño, desarrollo y mejoramiento del brazo MAX Menace ahora distribuído por Matthews. Este brazo es un dispositivo utilizado para el posicionamiento preciso de la iluminación, cámaras y accesorios.
Joe Murtha, William Frederick y Jim Markland de Anton/Bauer, Inc. recibieron una placa en reconocimiento a la creación del sistema de energía portátil CINE VCLX, que permite realizar filmaciones en lugares donde la energía eléctrica no es accesible.
La única estatuilla que se entrega en esta ceremonia que sea realiza antes de la ceremonia de gala, fue dada a Cooke Optics Limited por su innovación en el diseño, desarrollo y manufactura de lentes de cámara avanzados. Estos lentes han sido usados para filmar películas como Zero Dark Thirty, A Good Day To Die Hard, After Earth, Hugo, Extremely Loud and Incredibly Close, Midnight in Paris and My Week With Marilyn.
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