• El 60 por ciento de las empresas no pude actuar de manera rápida y efectiva ante ciberataques.

• Durante este año se han registrado más de 1,000 ataques por día a instituciones del sector privado.

• La vulnerabilidad en los módems de wifi y una falta de seguridad de la red son las causa primordiales.

En el país los ataques cibernéticos son una tendencia que va al alza. Tan sólo durante el último trimestre del año se registraron más de 70 millones, con lo cual, México se ubicó dentro de los 5 países que más ataques recibe al año.

De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) en 2021 el gobierno recibió más de 252 mil reclamaciones tipificadas en estos rubros. Además, en lo que va del año, los delitos cibernéticos que más se han llevado a cabo son los relacionados con los fraudes virtuales y ransomware, donde adultos mayores, niños y jóvenes entre 20 a 25 años son los más afectados.

“Debemos de tener en consideración que es de vital importancia hablar de ciberseguridad, tenemos que asumir el compromiso de explicar de manera clara y sencilla cómo ocurre el robo de datos, informar por qué es tan importante tener un buen manejo de cuentas y resaltar la importancia que tiene cambiar de contraseñas de manera constante. Tenemos el reto de cuidar a los más vulnerables, su información y activos económicos; es cierto, la tecnología no se detiene, pero podemos enseñarles cómo protegerse” comenta José Juan López, director de seguridad de EULEN México.

Y es que el desarrollo tecnológico y la creciente interconectividad han abierto la puerta a nuevas amenazas; routers, smartphone, impresoras y el acelerado crecimiento del internet de las cosas (loT) han contribuido a que cada día se lleven a cabo más delitos. Las principales causas son la falta de medidas de seguridad y la vulnerabilidad en los módems de wifi.

En un panorama en que la red es usada para conectarlo todo desde televisores, cerraduras, refrigeradores y focos, la vulnerabilidad es palpable. En México, no existe la educación en materia ciberseguridad, no sabemos cómo prevenir intrusiones, pues solemos dejar en casa la red abierta o darles la clave de WiFi a nuestros invitados, dando sin darnos cuenta acceso a nuestros dispositivos.

A nivel empresarial la situación no es distinta, durante este año se han registrado más de 1,000 ataques por día a instituciones bancarias, dependencias gubernamentales, empresas de telecomunicaciones, agencias y transnacionales. Esto ha provocado que uno de los mayores riesgos que enfrentan las instituciones sea el que puedan vulnerar sus sistemas.

Una intrusión a alguna de estas instituciones podría provocar daños no sólo en su funcionamiento, sino, poner en riesgo la seguridad de sus clientes, afectar su reputación y enfrentar pérdidas económicas.

Esos datos son el parteaguas perfecto para comprender que la falta de capacitación dentro de las áreas de TI es el mayor reto a vencer, ya que se estima que cerca del 60 por ciento de las empresas no pude actuar de manera rápida y efectiva y tan sólo un 5 por ciento de las compañías que operan en el país cuentan con la capacidad de responder un ataque de manera inmediata, el resto puede tardar hasta dos semanas en detectar que sus datos han sido robados o sus cuentan han sido hackeadas.

¿Cómo detectar ataques cibernéticos?

Una de las acciones que nos vuelven más vulnerables es el mal manejo de contraseñas, ya que la mayoría de los usuarios utiliza la misma en sus cuentas bancarias, redes sociales y códigos de desbloqueo en dispositivos móviles, acción que facilita enormemente el trabajo de los ciberdelincuentes.

Ante este panorama, lo más importante es estar atentos a algunas de las siguientes señales que podrían indicar que estamos siendo víctimas de una intrusión:

• Publicación no autorizada de mensajes y contenidos en redes sociales
• Llegada masiva de correos con ligas sospechosas
• Aumento de actividad en el disco duro
• Lentitud en los sistemas
• Fallos en los sistemas de autentificación de contraseñas y problemas de conexión, lentitud o errores en los dispositivos móviles.

Es así como, para hacer frente a una situación de crisis, las empresas y usuarios de Internet deben perfeccionar sus métodos de seguridad, contando con herramientas tecnológicas avanzadas y personal sumamente capacitado que pueda actuar de manera eficaz ante cualquier indicio de ataques cibernéticos.

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