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El plan de la SE y Coparmex buscará también crecer la representación femenina en la industria.
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Pymes y grandes compañías que produzcan en territorio nacional podrán adquirir las licencias.
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Productos mexicanos tendrán nuevamente el distintivo “Hecho en México” en una gran campaña.
El resurgimiento de la marca “Hecho en México” tiene un trasfondo más amplio que el rebranding de un plan económico entre el Gobierno de México y la Inversión Privada, pues busca hacerle frente a la crisis económica motivada por la inflación, la guerra entre Rusia y Ucrania y los estragos de la pandemia de Covid-19. De hecho, el popular sello nacional será relanzado con el único fin de aminorar el impacto económico mundial a través de incentivos hacia la compra nacional.
Y es que el panorama de incertidumbre económica ha acrecentado en México en los últimos años, pese a los anuncios y estrategias para controlar los precios de los alimentos en una tasa de inflación que se coloca como la más alta en 22 años.
Tan solo el mes de julio de 2022 terminó con una inflación general del 8,15 por ciento, solo similar a la vivida en julio del 2000 cuando la tasa era del 9,12 por ciento, de acuerdo con el Índice Nacional de Precios al Consumidor, dado a conocer este martes por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Datos son reveladores y preocupantes, sobre todo cuando se habla de un salto drástico, con una variación del 0,74 por ciento con respecto al mes de junio de 2022.
Reviven marca “Hecho en México” entre inflación y compra local
La Secretaría de Economía (SE) y el sector privado anunciaron el relanzamiento de la marca “Hecho en México”, como parte de la política industrial que busca fomentar el consumo nacional y hacerle frente a la crisis económica que dejó la Covid-19, la carencia de insumos por la guerra entre Rusia y Ucrania y el creciente impacto inflacionario.
“Habrá un relanzamiento de la marca ‘Hecho en México’ y es una oportunidad que tenemos de identificar lo que se hace en el País”, anunciaron juntos José Medina Mora, presidente de Coparmex, y Tatiana Clouthier, titular de la SE.
Y es que el 24 de febrero de 2017 de publicó el “Acuerdo mediante el cual se establecen los requisitos para otorgar el uso, licencia y sublicencia de la marca ‘Hecho en México'”, modificado un año después para dar presencia a los productos nacionales frente a los productos provenientes del extranjero.
Y es que el objetivo, además de asociar la calidad con las manos mexicanas, es que la economía nacional gire de forma interna y de trabajo y ganancias a los productores y trabajadores del país, generando con ello una derrama económica mayor y un escenario favorable para la exportación de productos.
En este panorama, México ha destacado a lo largo de la histórico. Tan sólo en 2021 –en plena recuperación pandémica– el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) confirmó que el país rompió récord en exportaciones, ya que los productos agrícolas nacionales generaron 18,7 millones de dólares entre enero y mayo de ese año.
De acuerdo con la Organización Mundial de Comercio Exterior, México se ha posicionado en el onceavo lugar de los países con mayores exportaciones del mundo, con crecimientos sostenidos alrededor del 9 por ciento internaual.
“Se pondrá énfasis en la participación de las mujeres. Se reconoce que su incorporación en las empresas ayuda a aumentar la productividad y el crecimiento económico. También el fomento a competitividad y capacitación para productividad, reconociendo que tenemos mala productividad con respecto a otros países de la OCDE. Sólo tenemos 30 por ciento de productividad que en promedio tienen en el organismo internacional”, subrayó el presidente de la Coparmex ante el proyecto que reviviría el singular sello nacional en los productos de origen.
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