México D.F.- Al hablar de una “empresa sustentable” podríamos decir que es aquella que se preocupa y ocupa por satisfacer las necesidades de sus consumidores sin poner en riesgo las necesidades de las generaciones venideras, además de pensar en el bienestar de sus empleados, comunidad, entorno y país. Los atributos y actividades que comprende son de corte ambiental, social y económico, buscando un equilibrio entre ellos. Las empresas sustentables se relacionan con decisiones diarias y tiene impacto directo en el planeta y los seres que habitan en ella.

La página www.sinsofgreenwashing.org nos habla de siete pecados que cometen las falsas empresas sustentables y aquí te los presentamos.

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Pecado del Comercio Oculto

El decir que un producto es “verde” sólo porque en la capa exterior así se ve no quiere decir que sea una empresa sustentable, se deben considerar todos los aspectos de fabricación. Por ejemplo: una empresa que dice reciclar plástico para la fabricación de nuevas productos, no es sustentable si durante el proceso de reciclaje produce emisiones de gases que promuevan el efecto invernadero. Una verdadera empresa sustentable se enfoca en todos los aspectos para que no sean dañinos al medio ambiente.

Pecado de carencia de pruebas

El sólo afirmar que contribuyes con el ambiente no quiere decir que así sea, las personas de hoy en día requieren información que respalde la sustentabilidad, un ejemplo de esto se da en algunas empresas de la industria papelera, quienes afirman tener varios procesos de reciclado post-consumo sin presentar pruebas que los respalden.

Pecado de la ambigüedad

A veces resulta que vemos productos que en su nombre indican estar hechos con productos naturales, y cuando revisamos la lista de ingredientes, nos encontramos con químicos dañinos como pueden ser arsénico, uranio, mercurio, etc., y por increíble que suene a la hora de reclamar, muchas empresas se defienden diciendo que a final de cuentas todos estos productos son de origen “natural”, lo que no aclaran es que también son “venenosos”. Recuerda “Todo lo natural” no es necesariamente “verde”.

Pecado de adoración a las falsas etiquetas

Este pecado es cometido por empresas que presentan un producto en el cual a través de palabras o imágenes imitan certificaciones ambientales, dando la impresión de una falsa aprobación por parte de terceros.

Pecado de la irrelevancia

Existen empresas que disfrazan sus productos con información poco útil o innecesaria, con tal de presentar productos “sustentables”, un ejemplo son aquellas marcas que en su etiqueta incluyen la leyenda “Libre de CFC”, lo cual es irrelevante, pues el uso de CFC en productos está prohibido por la ley desde hace muchos años.

Pecado del mal menor

Se dice que “de los males el menos peor”, por lo que algunas empresas hacen uso de esto para disfrazar productos que no dejan de ser dañinos al medio ambiente, por ejemplo, aquellos autos con reducción de emisiones de CO2, aunque no contaminen tanto como otros, a final de cuentas no dejan de dañar el ambiente.

Pecado de mentir

Se basa en realizar afirmaciones que simplemente son falsas. Un ejemplo de esto es presentar un producto elaborado “artesanalmente” cuando la realidad es que, hombres, mujeres y niños son explotados en el proceso de elaboración.

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