La inflación que está golpeando a prácticamente la totalidad de los países del mundo también tiene su impacto en México, donde la suba de precios se advierte en la gran mayoría de los productos y servicios.
Los alimentos básicos no son la excepción y los sectores con menos posibilidades económicas son los más perjudicados.
En efecto, el paulatino aumento en el costo de los servicios, como el gas y la luz, sumado al incremento del precio del maíz, afecta a las tortillerías, que deben trasladarlo a los clientes.
En algunos lugares, como en Ciudad Juárez, Chihuahua, ha provocado que el kilo suba hasta los 24 pesos, y más.
Sólo algunas tortillerías han logrado mantener los precios en 19 pesos, como a comienzos de año, pero resignando rentabilidad.
Se advierte que las estrategias de los puntos de venta son dos bien diferenciadas:
- aumentar en la misma medida que lo hacen los insumos y los servicios básicos,
- o sostener los valores de comercialización al público, resignando ganancias, pero con la idea de evitar la pérdida de clientes.
¿Cuánto tiempo se puede sostener esta última estrategia? Todo depende de la espalda financiera del comerciante y de que la inflación no siga subiendo.
“Ahorita todavía nosotros no hemos querido subirlo porque no le queremos cargar la mano a la clientela”, le dijo a El Universal Emilio Cruz, dueño de una tortillería en Ciudad Juárez. Cruz es partidario de la estrategia de contener la suba a costa de su ganancias, por eso mantiene, por ahora, el kilo a 19 pesos. “Hay lugares que lo tienen desde 20 y hasta 24”, agregó.
Según el comerciante, que centra su negocio en la venta a restaurantes (unos 200 kg diarios de tortilla), los mayores incrementos se han producido en el gas, el maíz y la Maseca.
Cruz advierte que, si siguen los aumentos en los insumos, “no habrá de otra, tendremos que aumentar los precios”.
Las tortillerías aumentan por la inflación de los insumos y los servicios
Desde la Asociación de la Masa y la Tortilla de Ciudad Juárez, indican que los mayores aumentos se produjeron en el valor de la masa en las harineras locales.
La situación de las tortillerías y la inflación, según destaca El Universal, es común en todas las ciudades de la frontera norte de México, con precios que van de 24 hasta los 26 pesos en Reynosa (Tamaulipas) y Piedras Negras (Coahuila), respectivamente.
El último incremento en la zona fue de cuatro pesos, a mediados de 2021.
“En Nuevo León, el precio de venta del kilo de tortilla va de 19 pesos en las tortillerías de colonias populares, hasta los 24 pesos, en supermercados y carnicerías de prestigio”, apunta el periódico.
