Desde la conexión humana hacia la cohesión social.
Y recordemos, no estamos solos, alguien siempre nos ve.
El simple hecho de prestar atención establece una conexión emocional en cuya ausencia la empatía es imposible. “Inteligencia social” (2006), Daniel Goleman.
Caminemos hacia la cohesión personal y social.
La conexión es indispensable en la vida y en toda coexistencia en el universo, en todo lo existente; por ejemplo, si reflexionamos acerca de los cuerpos celestes como la luna, los planetas, cometas o asteroides veremos sin duda que lo que los conserva en el espacio cósmico es un enlace, un vínculo. Como seres humanos estamos formados por conexiones, esto lo podemos comprobar desde cada cuerpo humano, formado por partículas microscópicas. Sin las diversas conexiones en nuestros cuerpos definitivamente no existiríamos; somos espíritu y materia desde que nacemos hasta que morimos y sin duda en los dos espacios somos conexión.
Conectar significa literalmente unir o poner en comunicación dos cosas o dos personas; al considerar la conexión relativa a personas ésta es la consecuencia evolutiva de nuestra socialización, es un vínculo orientado a conectar entre nosotros para convivir con mayor armonía, para resolver conflictos y garantizar así tal cual nuestra supervivencia; viendo esto en una forma simplificada, lo podemos comprobar cuando hemos conocido el caso de parejas o familias que pierden a un ser querido, el precio de la desconexión es muy alto, en algunos caso significa la imposibilidad del sobreviviente de seguir con vida.
La desconexión en el ejemplo de la pareja o de familias no siempre termina con la vida de los sobrevivientes, ya que las personas tenemos gran cantidad de conexiones con otras personas, vínculos que se ensanchan más allá del espacio que uno ocupa, y abarcan más allá del barrio o región en donde uno vive, donde trabaja, donde se moviliza, y de esta manera les permite integrarse corporalmente a una red social humana la cual sin duda les podrá sostener y mantener ante cualquier conflicto personal, grupal o social.
El significado de la conexión.
No hay nada como las relaciones, (las conexiones). En el universo, cada cosa esta relacionada (conectada) con las demás. Nada existe de forma aislada. No podemos pensar que somos individuos que pueden hacerse a sí mismos sin ayuda de nadie”. Margaret Wheatley.
La conexión entre personas nos da identidad, sentido de pertenencia, seguridad, confianza, nos da la posibilidad de hacer sentir y sentirnos importantes en la vida de las personas, entre familia, amigos, colaboradores, entre gobernantes y ciudadanos.
El ser humano en el Siglo de la gran conexión …
Hoy día, no obstante, toda esa filosofía por atención y amor al prójimo que leemos, conocemos y en algunas ocasiones presumimos que aplicamos, la realidad es que lo que vemos y vivimos, es una distorsión de la concepción y del trato hacia el ser humano, esto es a la persona – y no hablamos desde el punto de vista académico o desde las expresiones que vemos en las paredes de las organizaciones, producto de sus documentos estratégicos, de su misión, visión, valores -, lo hablamos y lo vemos desde la acción de las personas hacia otras personas.
Todos expresamos preocupación por el ser humano, pero los hechos no hablan de esa preocupación y menos de esa ocupación hacia la persona; vemos el trato entre familias, entre parejas, en las organizaciones, la falta de atención del reclutador hacia sus candidatos, el del empleador o jefe con su colaborador, el del inversionista con su asociado, el de la empresa con su proveedor y con su cliente, y más grave el de los gobernantes con su gobernado, con sus ciudadanos, todos tratando de sacar ventaja de la persona en diversas formas.
En este escrito hacemos énfasis a la persona en singular, para dar más peso a la preocupación e importancia de ver a cada ser humano como único e irrepetible, con sus retos, ilusiones, preocupaciones, etc.
Estamos plenamente seguros de que el sentido humano es el que nos debería regir a todos. Las personas, hombres y mujeres, pedimos a gritos un trato cara a cara, digno en todos los ámbitos de actuación, como se mencionó anteriormente, en el familiar, empresa, gobierno, en la sociedad en general. Pedimos trato personalizado, y no porque creemos que podría darse servicio en forma cien por ciento individualizado a todos, sino porque si partimos de un pensamiento de soluciones individuales y se aplican a los sistemas y operaciones globales, las acciones del día a día podrán ser de gran calidad, de pronta solución, y en forma muy importante de trato respetuoso hacia la persona, hacia el ciudadano.
Luchemos por enaltecer el significado de ser humanos, de ser personas, de conectar y exigir ser conectados de manera íntegra, ética, de vincular el concepto individual del ser humano al concepto grupal de seres humanos por parte de los gobernantes; no podemos permitir que tendencias populistas con su estilo de comunicación y conexión desvirtúen y confronten la relación entre las personas que pertenecemos a diversos niveles socioeconómicos y políticos, esto a través de su poder, por lo que es necesario concientizar y comprender cómo nos están conectando, cómo nos quieren vincular y de esta manera descubrir quiénes son y que pretenden.
Brindemos por alcanzar sana conexión en el 2022.
Lograda la identidad, el sentido de pertenencia y la conexión social, se da un paso importante para la cohesión social que es el grado de consenso de los miembros de un grupo social o de la percepción de pertenencia a un proyecto o situación común; y es en esa medida de intensa y sana interacción social en torno a un proyecto nacional legítimo para todos a la cual debemos aspirar a vivir para buscar de manera solidaria salir adelante como país promoviendo la unidad y encendiendo esa chispa y deseo de cambio individual, grupal y de consecuente conexión social en paz, con solidaridad, libertad y democracia que es el sistema político que defiende la soberanía y el derecho del pueblo a elegir y controlar a sus gobernantes y no al revés, que es lo que proclaman los populistas; Afortunadamente siempre habrá personas y organizaciones de la sociedad civil que no bajarán la guardia, no callarán y siempre cantarán a los cuatros vientos que si nadie nos ve, ellos ahí están, tal como lo hace Laura Pausini en su melodía Yo Sí.
Decidamos y resolvamos: ¡Vivir conectados y NO divididos en el 2022!
Nota: si estás de acuerdo comparte esta colaboración y recuerda que ahora prevalece el OMICRON, no bajemos la guardia y sigamos con el #QuédateEnCasa y por favor #UsaCubrebocas.