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A pesar de la cruzada en que Peta y otras organizaciones se encuentran contra el uso de pieles exóticas en el mercado de lujo, las marcas siguen apostando por su confección.
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En medio de estos esfuerzos, algunas marcas han apostado por dejar de vender pieles con pelo, especialmente usadas en abrigos.
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Vuitton y Gucci son dos marcas que han consolidado un poderoso mercado, donde se ha vuelto clave el valor de los productos.
Un aterrador video de Peta se ha convertido en la peor bomba mediática contra Vuitton y Gucci, exhibiendo cómo estas marcas de lujo se han dado a la tarea de poder mejorar los resultados y lo más desafiante en ello, entender qué elementos son cruciales para definir retos en el mercado.
Ante estos elementos queda patente un elemento crucial y en este ejercicio se vuelve tremendo comprender desde qué perspectiva se ha detonado el trabajo de marca, sobre todo ahora que el debate entorno a las pieles y el uso de estas en la creación de productos es tremendamente cuestionable.
La última evidencia de Peta contra Gucci y Vuitton
El video “Propietaria de Louis Vuitton expuesta: trabajadores golpean a pitones en la cabeza por cuero” que se ha convertido en petardo contra Vuitton y Gucci, vuelve a exhibir las viejas prácticas de estas marcas acostumbradas a las pieles exóticas para lograr productos únicos, solo que a decir de la evidencia, el alto costo de los materiales no se traslada a evitar el sufrimiento que ha quedado patentado en los videos.
Ante este escenario, un aspecto que no podemos perder de vista nos demuestra un reto muy importante y es la conclusión de Peta en un video, donde ha exhibido cómo se obtienen pieles de reptiles vivos, para la confección que estas marcas hacen de su poderosa categoría de accesorios.
Dentro del video se aprecia como se destaza a los reptiles con el uso de machetes, mientras que en víboras se emplean prácticas como llenar sus cuerpos con agua, para retirarles sus pieles en vida.
Esta prueba grabada en granjas de reptiles en Indonesia son parte de la gran cantidad de pruebas que Peta ha lanzado, para demostrar las terribles prácticas que se cometen en contra de los animales y como estos se han convertido en parte de una terrible actividad en el mercado, donde sin lugar a dudas el alto costo de los accesorios no se traslada al trato ético de estos animales, hecho que demostró enviando una carta aludiendo que LVMH y Kering, ambos conglomerados dueños de marcas como vuitton y Gucci, respectivamente, se abastecían de pieles provenientes de estos lugares.
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