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La viralidad en las redes sociales es una publicidad que no se puede comprar.
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Las empresas aluden a la empatia para impactar de forma positiva con el consumidor.
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No sólo se trata de vender un producto, las “experiencias” generan lealtad e impactan a públicos diferentes.
Los patrocinios en eventos siempre son un “ganar ganar”, sin duda venderse como marca en festivales, fiestas y en todos lados donde puedas poner el logotipo de tu empresa, es una de las mejores estrategia de marketing. Resulta que vender una experiencia es más efectivo a la hora de recordar una marca que solo buscar posicionar un producto.
Durante los últimos días por medio de las redes sociales se volvió viral la historia de la pequeña Ariana, oriunda de Ciudad Juarez, Ale su madre, dio a conocer que su pequeña hija decidió festejar sus cuatros años con una temática muy particular. La orgullosa madre compartió que la pequeña Ari, escogió el tema de Coppel, ya que le recordaba a su abuelo recién fallecido.
Esta conmovedora historia llegó a oídos de la gerencia de Coppel Plaza Juárez municipio de Casas Grandes, los cuales decidieron patrocinar el evento y regalar la decoración y algunos presentes a la feliz pequeña cumpleañera; Sin embargo, estos sucesos son más frecuentes cada día.
Otro caso muy conocido fue la fiesta del pequeño Ricardo, Mejor conocido como “el niño concha”, por tomar la decisión de escoger una temática tan poco común, sus padres y algunos amigos compartieron la historia con fotos y videos por Twitter, las redes explotaron con la ternura del pequeño oriundo de Veracruz, hasta rápidamente llegar a las oficinas de Grupo Bimbo, los cuales decidieron acudir a su domicilio con botarga y todo, para regalar al pequeño todo para su fiesta, claro con el logotipo impreso por todos lados.
La buena voluntad de las empresas al cumplir los sueños de los pequeños es palpable, la sociedad mexicana lo toma con agrado y en pocos días se vuelve viral, es aquí cuando la estrategia de marketing, toma fuerza y el impacto generado por los internautas sin pedirlo, es una publicidad que no se puede comprar, cientos y miles comparten la historia y simpatiza con esta marcas por tener una intención “noble”. Este tipo de estrategia de promocionar eventos, es más común de lo que se puede pensar.
Ya sea que crees tu propio modelo de evento como, Corona capital, Corona Fest, Red Bull y sus deportes extremos. Pero tomemos el cazo de, “Tecate Pa’l Norte”, donde si bien sabemos que Tecate te vende cerveza, la emisión de cada “Tecate Pa’l Norte”, llega a más de 114 mil personas en promedio por evento y se estima que impacta a más del doble de esa cifra durante sus transmisiones en vivo y propaganda previa, entonces ya no solo vendió su marca a los consumidores habituales, también logra con cada festival impactar nuevos públicos, como los amantes de la música, turismo de festivales y con ello generar un comercio incalculable, en colaboración con cada uno de los artistas y colaboradores y de mas socios comerciales.
Entonces, el patrocino por muy pequeño que aparente como acudir a una pequeña fiesta de cumpleaños, no se puede tomar a la ligera, ya que no es posible del todo poder estimar el impacto favorable que genera este tipo de actos de “buena fe”.
La publicidad que generan este tipo de patrocinios resultan en una gran estrategia, con algo tan sencillo que apela al romanticismo social o el disfrute de un evento fuera del consumo de una marca, las empresas generan un tipo de publicidad incalculable, impactando no solo a sus consumidores habituales, si no también a diversos públicos y potenciales compradores, generando lealtad y buena voluntad entre la empresa y la sociedad.
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