“Tu indiferencia te hace cómplice” y “Tu conducta te hace cómplice”. Esas dos frases forman parte de una campaña de marketing y publicidad social presentada en el Ayuntamiento de Burgos, en España, y que causó una gran polémica.
No es para menos, ya que el concepto de ambas frases pone a la mujer como cómplice de una realidad que golpea en ese país, lo mismo que en la mayor parte del mundo.
A partir de las críticas, según publica El Mundo, la Concejalía de Mujer de esa ciudad se vio obligada a retirar los carteles de la campaña que fue financiada con fondos del gobierno local.
Las críticas llegaron especialmente desde las asociaciones que trabajan por la mujer y las que dedican a ayudar a prostitutas a salir adelante y buscar otros trabajos.
Bajo el hashtag #Frenemoslaprostitucionylatrata, la campaña es una reedición de una iniciativa previa en la que puso el foco en el consumidor de prostitución como responsable.
Sin embargo, en la nueva versión, también se apuntó a la supuesta “permisividad” de la víctima, lo que generó la avalancha de voces críticas.
Los responsables de la campaña, según el mismo medio español, se han visto obligados a pedir “disculpas a las personas que pudieran haberse sentido ofendidas por interpretaciones fuera de contexto”.
Se aclaró que “no se pretendía en ningún momento que la culpabilidad fuera dirigida a las mujeres, como se ha llegado a manifestar”.
Publicidad y críticas
En las redes sociales, las críticas no se hicieron esperar. La reacción de los usuarios de Twitter muy especialmente generó que se levantaran los carteles más polémicos.
Cuatro de cada diez hombres son #puteros pero la culpa de ser explotadas sexualmente la tenemos las mujeres:
¡Vergüenza! pic.twitter.com/3j4YTtuoxs— Nuria Coronado (@NuriaCSopena) September 21, 2021
“La culpa de la esclavitud la tienen los esclavos”, escribió un usuario de la red social del pajaro azul. “¿A quién se le habrá ocurrido esta campaña?”, apuntó otro usuario tratando de entender de dónde había salido la creatividad.
“Llevo un rato respirando. Es para no dar crédito. Con dinero público. ¿Cómo es posible? Esto no es casual que lo sepa todo el mundo!”, exigieron desde otra cuenta.
“Madre de Dios. ¿Nadie vio que esto es un error?”, apuntó otro usuario tratando de entender cómo la campaña de publicidad superó los filtros dentro del gobierno y de la misma agencia creativa sin que nadie se detuviera a ver que no era una buena idea.
Luego de las críticas, el Ayuntamiento de Burgos retiró los carteles de publicidad polémicos y sólo dejó otros dos.