¿El fin anonimato en las redes sociales está cada vez más cerca? Al menos esto es lo que parece a medida que los mensajes de odio, racismo y discriminación avanzan en las conversaciones de social media como Instagram, Facebook, TikTok y, especialmente, Twitter.
Un ejemplo es lo que está sucediendo en el Reino Unido a partir de la conversación que rodeó la derrota de la selección de Inglaterra en la final de Eurocopa.
Todo comenzó luego de la serie de penales en la que tres jugadores ingleses, Marcus Rashford, Jadon Sancho y Bukayo Saka, fueron atacados racialmente en las redes sociales después de fallar sus ejecuciones que luego derivó en el triunfo italiano.
Los comentarios fueron tan duros y discriminatorios que el debate sobre la necesidad de regular de algún modo el intercambio en las redes está en agenda más que nunca en UK.
Una de las consecuencias fue la apertura de una petición para el Parlamento de Gran Bretaña para que la identificación sea un requisito obligatorio para tener una cuenta en las redes sociales.
El pedido ya tiene 680 mil firmas y ha despertado el interés de numerosas estrellas de la música, el cine, el deporte y otras celebridades inglesas. También los influencers más reconocidos se han sumado al movimiento.
La modelo Katie Price, por ejemplo, y la presentadora Laura Whitmore, piden que las cuentas personales en sitios como Instagram, Facebook, TikTok y Twitter estén vinculadas a una forma verificada de identificación.
Esto evitaría, según dice la petición, “una actividad dañina anónima”, al permitir una “trazabilidad” para hallar a las personas responsables de delitos raciales, por ejemplo.
Casi al mismo tiempo, Boris Johnson, primer ministro inglés, se reunió con los máximos referentes en ese país de las tecnológicas más importantes. Era una reunión programada con antelación, pero fue la oportunidad perfecta para exigirles que “mejoren sus sistemas de identificación”.
Problema en las redes: Instagram, Twitter, Facebook
Gran Bretaña está tratando desde hace tiempo de prohibir el ingreso de los racistas a los partidos de futbol, pero no le está siendo fácil.
La petición al Parlamento, que fue iniciada por la madre de una joven de 19 años que nació con problemas de displasia y autismo que fue víctima de ataques en las redes, apunta a que el actual proyecto de ley de seguridad en línea que impulsa el gobierno sea más específico y convierta al abuso discriminatorio o rcial online en un delito penal.
La norma, por ahora, no prevé que los usuarios de las redes como Twitter, Facebook o Instagram deban necesariamente identificarse con documentos y domicilios legales.
El gobierno respondió a la petición diciendo que la nueva legislación buscará abordar la actividad dañina anónima en Internet, pero agregó que “la verificación de la identidad de los usuario para las redes sociales podría afectar de forma desproporcionada a los usuarios más vulnerables e interferir con la libertad de expresión”.
