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El desplome de la Línea 12 se convirtió en una tragedia de escala global a raíz de su costo humano y sus implicaciones políticas
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Sheinbaum y otros agentes de Morena han señalado que la responsabilidad del accidente está en las tareas de mantenimiento
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Pero opositores apuntan que las fallas son de tipo estructural, por lo que estarían presentes desde que se construyó el proyecto
Este lunes, Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la Ciudad de México (CDMX) dijo que ya entró en contacto con Grupo Carso e ICA para “reuniones técnicas”, de acuerdo con LatinUS. No solo eso, sino que la mandataria estaría buscando que las compañías, responsables de la construcción del tramo desplomado de la Línea 12, paguen por una parte de sus reparaciones. No es claro si ya le propuso a las marcas este plan o qué le habrían respondido al respecto.
Según Infobae, se espera que tenga una reunión física con las empresas, así como la francesa Alstom, la próxima semana para seguir discutiendo la rehabilitación de la Línea 12. Además del reportaje del New York Times y el peritaje de la firma noruega DNV, un estudio del Colegio de Ingenieros de México reveló varias fallas estructurales graves con esta ruta. Al menos un tercio de del tramo elevado del Metro está afectado por grietas o separación insuficiente entre vigas.
Sheinbaum reafirmó que se reunirá este lunes con el equipo técnico nombrado para liderar la rehabilitación de la Línea 12. El comité está formado por, entre otros, José María Riobóo, un hombre cercano a López Obrador. La idea es que en un mes se tenga listo un plan ejecutivo para volver a poner la ruta en pie. Apuntó también que quiere empezar a trabajar en reconstruir esta línea del transporte público porque los peritajes aún tomarán mucho tiempo en concluir.
La Línea 12 y Claudia Sheinbaum
No importa si logra que Carso e ICA paguen parte de la reparación del Metro o no, es casi una certeza que el caso de la Línea 12 atormentará el resto de la administración de Sheinbaum. De acuerdo con El Financiero, es muy probable que esta línea no vuelva a operar en los tres años que le quedan a la funcionaria morenista en el poder. Esto, en parte por las recomendaciones del Colegio de Ingenieros de México y la falta de fondos disponibles al gobierno capitalino.
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La presión sobre la jefa de gobierno la CDMX también está empezando a surtir efecto. Según Proceso, Sheinbaum denunció luego de las elecciones que la tragedia de la Línea 12 fue un instrumento que se usó sin piedad contra Morena. En este sentido, ha respaldado a López Obrador en sus reclamos de que se inició una “guerra sucia” y de una fuerte “campaña de desprestigio”. Independientemente si tiene razón o no, podría poner en jaque a la mandataria.
De acuerdo con Excélsior, Sheinbaum se estaba perfilando para ser la candidata presidencial más fuerte en los comicios de 2024, como sucesora de López Obrador. Esto, en gran parte porque la tragedia de la Línea 12 parecía pegarle más duro a Marcelo Ebrard, responsable de la obra, que a la actual jefa de gobierno. Sin embargo, ahora que está entrando a gestionar el proceso de rehabilitación de esta ruta del metro, podría empezar a tener tropiezos graves.
¿Estrategia, cobrar a Grupo Carso e ICA?
Volviendo a la idea de Claudia Sheinbaum que las marcas responsables de la construcción paguen parte del costo de rehabilitación, bien podría ser un ardid político. No solo se ha manejado recurrentemente un lenguaje desde el Palacio Nacional que dibuja una clara línea entre “el pueblo” y los empresarios. También se ha registrado una animosidad clara contra Grupo Carso en redes sociales, lo que podría anotarle un par de puntos entre los votantes.
Si en efecto es una estrategia política, la apuesta podría ser muy cara para Sheinbaum, y no solo porque potencialmente se está poniendo en una posición complicada con las marcas. También porque hay una intención desde el Gobierno Federal de limar ciertas asperezas que se han formado con los años. Al menos así parece indicar una reciente promesa que hizo el presidente al descartar reformas fiscales y aumento de impuestos malos para los empresarios.
