En meses pasados, entro en vigor una nueva reforma a la Ley de Trabajo que, de manera general, prohibe el outsourcing como modelo de contratación en el país. Ahora, se ha dado a conocer que la marca de cosméticos Mary Kay ha interpuesto el recurso de amparo para mantener este esquema de empleo.
En principio es importante mencionar que muchas empresas, tanto nacionales como extranjeras, habrían adoptado este esquema de trabajo ante la reducción de costos y procesos administrativos que suponía. No obstante, para muchos, el outsourcing dejaba de lado derechos fundamentales de cualquier trabajador en México con lo que las garantías para los empleados se veían suma ente mermadas.
El antecedente
A finales del 2019, el Senado de la República avaló una reforma a la Ley Federal del Trabajo para impulsar la eliminación de subcontrataciones para las empresas manos de terceros.
El sistema de outsourcing se venía impulsando desde la reforma a la Ley Federal del Trabajo, que se dictaminó en noviembre de 2012, e incluso desde antes. Preveía que las compañías podían recurrir a la contratación de trabajadores que estaban empleados por otras empresas, casi siempre especializadas en la gestión de recursos humanos, las cuales se encargaban del pago de su sueldo y las prestaciones que por ley le corresponden a los trabajadores, tales como seguridad social, aguinaldo, vacaciones, prima vacacional, entre otras.
Estas características que facilitan la gestión del talento, llevaron a muchas empresas a ver con buenos ojos este modelo de contratación; no obstante, muchas de estas compañías que ofrecen este servicio operan bajo sistemas irregulares.
Cifras de la empresa de gestión de recursos humano, Manpower, indican que hacia finales de 2018, el 80 por ciento de las compañías del país confiaban a las empresas de outsourcing la contratación de su personal.
A pesar de este interés, datos de la empresa Red Ring indican que sólo el 10 por ciento de las empresas que prestan los servicios de subcontratación de personal están en la formalidad y cumplen con todas sus obligaciones patronales.
A mediados de abril pasado, se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto con la reforma que regula el outsourcing, por lo que a partir del sábado 24 de abril entraron en vigor nuevas disposiciones referentes a la subcontratación laboral.
De manera puntual la reforma regula el outsourcing, lo que significa que aunque prohíbe la subcontratación de personal, permite la subcontratación de servicios especializados o de ejecución de obras especializadas que no formen parte del objeto social ni de la actividad económica preponderante.
Esta subcontratación deberá presentarse de manera formal con un contrato por escrito, señalando el número de trabajadores que participarán y la empresa tendrá que estar previamente registrada ante el padrón de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS).
Así, queda prohibido que las agencias de empleo o intermediarios intervengan en el proceso de contratación de personal participen en el reclutamiento, selección, entrenamiento y capacitación, entre otros. Estas empresas no pueden ser consideradas “patrones”, ese rol solo corresponde a las compañías que demandan los servicios de los empleados.
Mary Kay se ampara
Ante este escenario, la empresa de domestico precédete de Estados Unidos, Mary Kay consiguió un amparo provisional en contra de la reforma alrededor del outsourcing.
Esta información que fue dada a conocer este viernes por el Poder Judicial indica que “se concede la suspensión provisional” de esta ley para la mencionada empresa por parte del Juzgado Primero de Distrito en Materia Civil y de Trabajo con sede en el estado de Nuevo León, entidad en la que la empresa tiene un centro de distribución.
Con este logro legal para la compañía, Mary Kay se convierte en una de las primeras grandes empresas en ampararse contra la nueva Ley del Trabajo, situación que llama la atención si consideramos que las principales cámaras del sector privado, agrupadas en el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), ya llegaron a un acuerdo con el presente Andrés Manuel López Obrador y los sindicatos en una reunión celebrada el 5 de abril.
Aunque no se dieron a conocer de manera pública los argumentos con los que Mary Kay consiguió este amparo, si se sabe que será el próximo viernes cuando tenga lugar una audiencias incidental en la que se determinará si concede una suspensión definitiva, según el expediente 736/2021.
¿Buen movimiento para la marca?
Es importante emocionar que esta batalla ocurre en medio de tensiones entre sindicatos estadounidenses y algunas autoridades mexicanas, en donde los primeros han comenzado a levantar las quejas bajo el nuevo Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), al detectar empresas que presuntamente no cumplen con el respeto a los derechos laborales y de asociación.
Aunque para la marca esto le permitirá seguir operando con soluciones de reclutamiento externo cuando menos por un tiempo, es justo reconocer que para muchos usuarios el movimiento podría ser visto con malos ojos, si consideramos que alrededor del outsourcing se han manejado premisa relacionadas con las pocas garantías que entregan lo empleadores a sus colaboradores, situación que hoy por hoy es duramente pena con la preferencia de consumo.