• WeChat es utilizada actualmente por más de mil millones de personas, principalmente dentro de China

• Las autoridades de Pekín han lanzado una campaña de censura agresiva a contenidos que considera social o políticamente sensibles

• Esto es parte del enorme control que tiene el país sobre las plataformas de tecnología y los negocios en general

Una de las redes sociales y super apps más populares de China, WeChat, está implementando nuevas reglas para tratar de crear un entorno más “limpio” para su comunidad. De acuerdo con Reuters, la plataforma acaba de presentar una lista de 70 actividades que ahora se van a considerar “indecentes” o vulgares. Llevar a cabo alguna de éstas en un livestream provocará que el canal responsable reciba sanciones, pero no se especifico qué castigos se aplicarían.

Entre las actividades indecentes se cuenta picarse la nariz, dar nalgadas a alguien más, poner ropa interior en la cabeza de otras personas y dirigir el lente de la cámara a partes “privadas”. En esta categoría se contemplan tanto el pecho como los glúteos. De acuerdo con el servicio de seguridad de WeChat, estas actividades fueron detectadas como parte de un monitoreo diario de la plataforma. Específicamente de la herramienta de transmisiones en vivo Channels.

Otras violaciones que se vigilarán entre los usuarios de WeChat está mostrar tatuajes de forma deliberada, así como usar sábanas y faldas como props. También estará prohibido que las mujeres transmitan videos en vivo en ropa interior, bikini o envueltas solo en una toalla. Aparte se limitarán las cuentas que discutan temas políticos sensibles, que promocionen las apuestas o transmitan desde lugares no apropiados para menores. Entre ellos bares y clubes nocturnos.

¿Un precedente para otras redes sociales?

La situación de WeChat es particular porque está subordinada a las exigencias y peticiones de las autoridades chinas. Y Pekín trabaja arduamente para eliminar “contenido inapropiado” de las plataformas digitales en el país. De acuerdo con el New York Times, incluso la reunión de Friends fue censurada en los sitios de streaming. Específicamente, se retiraron las apariciones de Lady Gaga, Justin Bieber y BTS, críticos frecuentes de muchas políticas del país asiático.

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Realmente lo preocupante no es que China haya obligado a WeChat a poner reglas más duras para la red social y sus livestreams. Lo preocupante es que pudiera inspirar a otras compañías del mundo Occidental a tomar medidas similares. Agentes como el MIT Technology Review han pedido a agentes como Facebook y YouTube a mejorar sus sistemas de moderación de contenido y transparentarlas. Así pues, hay un deseo para que estas marcas trabajen mejor.

Tal vez más preocupante aún, hay precedentes de empresas tecnológicas occidentales que, al igual que WeChat, han tenido que ceder a las exigencias de Pekín. De acuerdo con SupChina, hay varias compañías que no solo han tenido que seguir las reglas que impone el país asiático para seguir operando en sus fronteras. Incluso han tenido que disculparse con este gobierno para evitar tanto la ira de las autoridades como la respuesta negativa de consumidores locales.

WeChat, una líder del mercado

También es un precedente notable cuando se considera que la app de mensajería es, por sí sola, un agente relevante en la industria de las redes sociales. Por ejemplo, en agosto del año pasado, WeChat recibió el apoyo de Apple, Disney y Ford, entre otras marcas. Esto, a raíz de una serie de prohibiciones que puso el gobierno de Trump a la aplicación china, como parte de su guerra comercial con el país asiático. Esto reforzó su posición como un gran agente global.

A eso se debe sumar que su modelo de negocio ha probado ser atractivo para otras redes sociales en el mercado. En enero del 2020, WhatsApp estaba tratando de copiar muchas de las características de WeChat para replicar su éxito. Entre ellas, el sistema de pagos que ha vuelto a la app china una líder en el mercado asiático. Así pues, no sería del todo sorprendente que las empresas de Occidente quisieran aprender, al menos parcialmente, de sus acciones.