Las dinámicas de consumo luego de la pandemia cambiaron de manera radical. Aunque las marcas consiguieron adaptarse con cierta rapidez a las nuevas condiciones, lo cierto es que en este periodo que ya ha sido catalogado por muchos como la era post-pandemia, la necesidad de evolución será aún mesa evidente. Quizás el ejemplo viene firmado por Walmart.

En principio es justo reconocer que mucho antes de la pandemia las marcas ya entendían que se enfrentaban a un consumidor con necesidades particulares en donde reducir el tiempo en el punto de venta era una de las grandes exigencias.

El primer esfuerzo 

Esto fue entendido por diversas marcas. Por ejemplo, ante un cambio en la manera en la que sus clientes adquirían sus productos, Starbucks anunciaba a principios de febrero del año pasado (antes de la pandemia) que la demanda habría impulsado su servicio de entrega en tienda así como las compras desde el auto, incluso superando a los pedidos que se hacen dentro de los mostradores de sus establecimientos, razón por la cual en se momento la marca anunciaba uno de sus cambios más importantes eón toda una década: Starbucks Pickup, un servicio que privilegiaba la venta de sus productos para recoger en local o servir a domicilio.

En la misma línea y con algo más de anticipación, hacia mayo de 2019, Walmart lanzaba sus Pickup Towers, un espacio al interior de las tiendas en donde el cliente podrá recoger sus compras realizadas en línea por medio de un código QR, haciendo este proceso más ágil y sencillo.

Antes de la pandemia estos movimientos eran sin duda aplaudidos y reconocidos como una verdadera innovación. No obstante, a unos cuantos meses, las cosas han cambiado de manera radical.

El esfuerzo de Starbucks hoy no es nada nuevo ni un plus para el cliente, se trata de la norma; mientras que en el caso de Walmart, un quiosco de recolección en tienda ahora no es funcional ante consumidores que por seguridad en su salud evitan ingresar a muchos de estos espacios aún cuando las vacunas están llegando y la contingencia luce cada vez más controlada.

Adiós a esta innovación

Con esto en mente, la gran minorista acaba de anunciar que sus Pickup Towers que hace casi dos años llegaron con bombo y platillo, tienen los días contados.

Estos quioscos de entrega que se instalaron en más de mil 500 establecimientos cuando menos en Estados Unidos, se eliminarán por ahora en aquel mercado, según indican desde The Wall Street Journal.

La razón no es otra más que una lectura puntual de las necesidades del consumidor, jugador que ahora exige un sólo lugar de recogida, y su preferencia es clara por el exterior de los establecimientos.

En una explicación entregada al mencionado diario, Walmart indica que “el cliente nos ha dicho que quiere un lugar de recogida y que ese lugar de recogida esté fuera de la tienda”.

El movimiento tiene ahora todo el sentido, si consideramos que el consumidor privilegia los servicios de entrega rápida debido a que evita estar al interior de las tiendas por mucho tiempo.

Recordemos que tal y como indicaron las conclusiones de un reciente estudio firmado por dunnhumby, el 36 por ciento de los consumidores se sienten en riesgo de infectarse mientras realizan sus compras, razón por la cual cuando menos en el mercado mexicano, las compras pickup ahora representan el 39 por ciento de todas las visitas a supermercados.