Uno de los primeros dichos que me fue compartido cuando iniciaba en el fascinante mundo del campo, fue que la agricultura es una disciplina que se aprende en 100 lecciones… pero es una por año. Asimismo, el surco es tan impredecible que cada año y de manera sistemática, los agricultores se referían al ciclo que recién terminaba como “atípico” aún y cuando todos, de algún modo lo son.
Y en ese andar, muchas son las lecciones que la agroindustria provee con contundencia y eficacia como las que a continuación me permito compartir con ustedes.
LECCIONES AGRÍCOLAS
- Y ahora ¿qué voy a hacer?: En medio de una parcela que era el escenario donde promovíamos la adopción de semillas híbridas para elevar la productividad de una comunidad agrícola en el estado de Hidalgo, una señora que superaba los 70 años, lanzó esa pregunta con cierto sarcasmo y acompañada de una sonrisa que reflejaba el éxito obtenido el año anterior y que respaldaba su intervención. “Le decía al ingeniero que ahora ¿qué voy a hacer si la semilla me dio una tonelada más? Ni modo que ahora ‘nomás’ me dedique a estar descansando”.
Platicando con ella al término del evento, me compartía que esa tonelada adicional representaba una oportunidad de renovar su casa, generar un ahorro o comprar ropa nueva para su nieto y concluyó diciendo que había varios agricultores de la comunidad que todavía no sabían a quién le venderían ese grano extra porque normalmente sacaban “un poquito para hacer tortillas, otro poco para los animales y lo demás para resembrar”.
Lección #1: La agricultura tiene un gran impacto en la vida de las personas.
- Más allá de la muerte: Después de luchar con gran valentía contra una enfermedad, un muy querido vendedor de la región, falleció. Mis compañeros narraban que había decenas de clientes, compañeros y por supuesto, familiares que se juntaron para darle el último adiós a un ingeniero que sin duda dejó huella por su simpatía y don de gente.
Lo que describieron quienes presenciaron tan emotivo suceso, jamás lo había escuchado: pidió que la carpa donde la gente se refugiaría del inclemente sol, así como otros tantos elementos en su despedida, debían ser de la marca para la cual trabajó y representó con dignidad hasta su último aliento.
Y así lo hicieron, cumplir su última voluntad que básicamente era una especie de evento promocional organizado por la marca para la cual compartió muchos años de su vida.
Lección #2: La conexión con los clientes, las marcas, y los compañeros de trabajo es un reflejo de la conexión con las personas en esta industria.
- La helada de Sinaloa: Quienes forman parte de una compañía, han firmado un contrato con metas específicas y cuentan con la tranquilidad de recibir puntualmente su salario. Por otro lado, los que han decidido emprender, tienen el gran compromiso, entre otras cosas, de buscar clientes y generar proyectos que, al gestionarlos con éxito, garanticen el crecimiento de su organización y sus empleados.
Ahora bien ¿se imagina usted enterrar (literalmente) su patrimonio en unas hectáreas, trabajar varios meses y que de pronto le digan que todo se perdió? Eso ocurrió en febrero del año 2011, cuando temperaturas inesperadamente bajas, golpearon el estado de Sinaloa, territorio conocido como el granero de México, destruyendo así la mayor parte de las 500 mil hectáreas de maíz y poniendo en jaque el programa alimentario del país.
Si bien se logró resembrar el 70% de la superficie en un tiempo récord gracias a la coordinación entre los agricultores, el equipo de manejo de crisis de nuestra compañía, las autoridades estatales, así como otros importantes jugadores del sector, nunca había presenciado o experimentado una sensación de vulnerabilidad tan marcada como todo lo ocurrido alrededor de este evento, pues además de ser de alto impacto, la resiliencia del sector es algo que se recuerda después de una década.
Aquí les hablé de la helada, pero traslademos esta experiencia a las zonas donde se han vivido inundaciones por la presencia de un huracán, las prolongadas sequías, la falta de insumos, temas de inseguridad, entre muchos otros y esto en su conjunto hace tan admirable la determinación de los agricultores.
Lección #3: Si trabajas con toda tu energía y consideras que es injusto no obtener un ascenso, pregúntale a un agricultor cuál es su concepto de justicia. Él sabe que no hay tiempo que perder, mucho menos en quejarse.
SEMBRANDO REFLEXIÓN
Los momentos que marcan nuestra vida, se conectan indudablemente con sensaciones y emociones, así como con la manera en que percibimos un acontecimiento en el que toda una comunidad se ve envuelta.
Es común que cuando se presenta un evento trascendente, como algunos de los que describí a lo largo de esta entrega, nos hagamos preguntas como ¿dónde estabas cuando…? ¿qué edad tenías el día que…? porque todos adquirimos aprendizajes distintos de los mismos estímulos. Es maravilloso aprender.
Todo esto es una razón más para generar experiencias memorables para nuestros círculos cercanos ya sean clientes, stakeholders, compañeros de labor o equipos funcionales, porque a final de cuentas, los negocios están basados en las relaciones interpersonales.
Gracias por leer, comentar y compartir este contenido y los espero en @soyjuanbecerril en distintas redes para seguir creando comunidad con el agromarketing como catalizador. Hasta entonces.