Amazon se ha con vertido en una de las marcas más grandes a nivel mundial, en donde su verdadera riqueza no está en los miles de millones de dólares que es capaz de generar año con año.
En realidad, esta marca ha conseguido ser líder por la cantidad de datos que es capaz de almacenar sobre las acciones que sus clientes realizan en todas sus plataformas y puntos de contacto.
aunque sería imposible entregar una cifra exacta de la cantidad de datos que maneja la empresa que lidera Jeff Bezos, lo cierto es que lo escrito por Leo Kelion, editor de tecnología de la BBC, puede poner en contexto de lo que estamos hablando.
“He sido su cliente desde 1999 y dependo de la compañía para todo, desde semillas para el césped hasta regalos de cumpleaños. Hice una solicitud para acceder a mis datos, pidiéndole a Amazon que revelara todo lo que sabe sobre mi. Leyendo los cientos de archivos que recibí en respuesta, me di cuenta de que el nivel de detalle es, en algunos casos, alucinante.
Una base de datos contiene transcripciones de todas las 31.082 interacciones que mi familia ha tenido con la asistente virtual Alexa. Otro archivo revela 2.670 búsquedas de productos que he llevado a cabo dentro de esta tienda desde 2017. Hay más de 60 columnas suplementarias para cada una, que contienen información como qué tipo de dispositivo estoy usando, en cuántos artículos hice clic y una serie de números que dan indicios sobre mi ubicación. Contiene detalles de las 83.657 interacciones que he tenido desde 2018, incluido el momento exacto del día en que realicé cada intervención”, apuntaba el editor hacia principios del año pasado.
Datos de los usuarios en peligro
Con estas cifras en mente que se replican por millones de usuarios en todo el mundo, nos podemos imaginar lo valiosa que resulta la base de datos de Amazon, misma que a decir de nuevos reportes, pudo no estar protegida de la mejor manera.
Información publicada por diversos medios internacionales, indican que tres empleados de Amazon, dos con sede en Estados Unidos y uno más ubicado en Europa advierten a sus superiores sobre un riesgo por inadecuados sistemas de seguridad que ponían en riesgo la información personal de millones de clientes.
Aunque esto pudo ser una ventaja importante para la marca en vísperas de cuidar aquello que es en realidad su verdadero negocio, lo cierto es que los informantes fueron despedidos tal y como revela la información.
A decir de los ahora ex-empleados de Amazon, dio prioridad al crecimiento sobre la seguridad de la información de los clientes a pesar de que estamos hablando de datos que podrían ser sensibles como historial de pedidos, información de pagos, datos recogidos a través de su negocio publicitario y formas de identificación para los vendedores en su plataforma.
“¿Imaginan si una empresa del tamaño de Amazon tuviera un brecha? El problema es que la información de identificación personal de millones de personas está en riesgo”, afirmó uno de los empleados que alertó sobre la presunta falla.
Demasiados datos
Para los empleados que trabajan es Estados Unidos la información que posee Amazon corre riesgo por que la compañía no comprende con exactitud que datos tiene, dónde los almacena ni qué personas pueden tener acceso a los mismos.
Así, uno de los ahora hombres despedidos informó que so alguna persona quisiera beneficiarse del “derecho al olvido”, sería “casi imposible para Amazon identificar todos los lugares donde residen los datos dentro de su sistema. La calidad de los controles que tiene Amazon es espantosa. Encontramos cientos de miles de cuentas de empleados que ya no están allí pero aún tienen acceso al sistema”, agregó.
Para Amazon esto no sería cosa menor. Amazon vende algo más que productos de belleza o tecnología. En realidad la marca, de cara al consumidor final, lo que vende es confianza en las compras online.
Una fuga de datos podría golpear uno de sus mayores beneficios, situación que se ha demostrado es complicado de revertir.