• El ahorro solo se logra cuando modificas tus costumbres y tu educación financiera.

• Estos consejos te serán útiles cuando necesites extender tus ingresos o últimos ahorros.

• Lo recomendable es tener un ahorro para el desempleo, pero la realidad es otra.

La pandemia de Covid 19 provocó una crisis económica y laboral en México difícil de proyectar, por lo que ahorrar es una necesidad en cada hogar.
El ahorro está asociado a costumbres, educación, cultura y no solo a tus finanzas personales, por lo que deberás esforzarte para lograr reducir tus gastos cuando estés desempleado o simplemente quieras ahorrar un poco más para un objetivo específico.

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Suprime gastos innecesarios

Los famosos gastos hormiga merman tu bolsillo prácticamente sin darte cuenta. Así que lo mejor es eliminarlos si estás desempleado, pero si solo quieres ahorrar más, redúcelos a una vez por semana.
No más café de Starbucks cada día, uno a la semana bastará para cumplirte tu capricho sin afectar tus finanzas personales.
Analiza bien tus gastos habituales y comienza a hacer los recortes necesarios en ellos.
Por ejemplo, no pagues la mensualidad del gimnasio, mejor sal a correr.
Cambia tus paquetes de servicios de telefonía e internet por uno de menor costo.
Tampoco necesitas todas esas plataformas de streaming como Disney + que te generan una mensualidad en entretenimiento fácil de reducir o suprimir por completo.
Otro rubro muy sencillo para ahorrar son las vacaciones, ni tienen que ser, ni deben ser tan lejos o por tantos días.
Bastará con visitar aquellos lugares cercanos a tu casa o incluso en tu misma ciudad para sentirte libre y lejos del estrés laboral.

Ahorrar cada semana

Un método fácil y progresivo es ahorrar tantos pesos como sean posibles cada semana e ir aumentando esta cifra cada vez.
Es decir, la primera semana ahorra 10 pesos, al final del año estarás ahorrando 202 pesos semanales, porque el año tiene 54 semanas.
No es una gran cifra, pero su objetivo no es hacerte rico o irte de viaje, sino crearte el hábito del ahorro.

Gastos fijos imprescindibles

Hay gastos que no puedes dejar de tener, como pagar la renta o el préstamo hipotecario, las mensualidades de tus créditos, los préstamos personales, los servicios básicos de tu hogar y por supuesto, la comida.
Debes seguir cubriendo tus necesidades básicas, pero sin gastar de más. Así que lo recomendable es comparar precios entre compañías y decidir si tus contratos de servicios básicos son los mejores del mercado.
Tus gastos fijos pero variables son más sencillos de ajustar, pues puedes comenzar a caminar más en vez de usar tanto el transporte público o bien ajustar tu ruta para usar menos transportes.
Planifica el menú semanal, incluso quincenal, de esta forma irás una sola vez de compras, ahorrarás tiempo, dinero y no cederás a la tentación de esas galletas extras que no vienen en tu lista de compras.
También se puede ahorrar al cocinar, si dedicas un solo día a la semana para preparar tus alimentos lograrás hacer más eficiente el gasto de luz y gas. Es solo cuestión que dividas en porciones los alimentos, así como los consumirás y comiences a usar el congelador para algo más que hacer hielos.
Toma baños cortos, esto te significará un ahorro en luz y gas. También apaga la luz en las habitaciones que no ocupes y mantén desconectados los electrodomésticos o línea blanca cuando no estén en uso.

Ofertas en ropa y calzado

Conviértete en un experto caza ofertas, verás que ahorras más de lo que has imaginado.
Quizá en invierno no necesites un traje de baño nuevo, pero si ya tienes planes de viajar en el verano lo usarás y fuera de temporada es cuando encontrarás todo a mejor precio.
Estos son solo algunos consejos para ahorrar, solo depende de ti que tanto quieres o estás dispuesto a hacerlo.
Estar desempleado puede ser desalentador, pero cuidar el dinero te ayudará a mantenerte enfocado en mejores tiempos.