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El concepto del outsourcing nació para cumplir con labores muy específicas.
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Las personas subcontratadas tienen exactamente los mismos derechos que el resto de los trabajadores.
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El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que buscaría eliminar el outsourcing.
Desde que apareció en el ámbito laboral mexicano, la palabra outsourcing ya se ve con cierto miedo. Este método llegó a México con la reforma laboral de 2012, que cambió el artículo 15 de la Ley Federal del Trabajo, para implementar lo que se conoce como “subcontratación laboral”. También conocido como tercerización, se trata de un medio por el cual una empresa adquiere a un trabajador que puede estar contratado por otra. Es decir, en teoría, permite que una persona preste sus habilidades especiales a una empresa diferente a donde trabaja. Esta, sin embargo, no suele ser la realidad. Recientemente, el presidente Andrés Manuel López Obrador, señaló que buscaría eliminar el outsourcing, pues se presta a ciertas prácticas ilegales.
El artículo 15-A de la Ley Federal del Trabaja explica: “el trabajo en régimen de subcontratación es aquel por medio del cual un patrón denominado contratista ejecuta obras o presta servicios con sus trabajadores bajo su dependencia, a favor de un contratante, persona física o moral, la cual fija las tareas del contratista y lo supervisa en el desarrollo de los servicios o la ejecución de las obras contratadas”. Las irregularidades son muchas, sobre todo quitando los derechos básicos a los trabajadores, debido a las facilidades que permite el outsourcing. Como lo explicó el presidente de México: se llegan a quitar a trabajadores de la nómina cada cierto tiempo, para no pagar derechos como el aguinaldo y posteriormente se vuelven a contratar sin el menor problema.
Sin embargo, mientras llega una mencionada nueva reforma en estos aspectos, aquí te presentamos los derechos que todo trabajador contratado por outsourcing debería tener.
Prestaciones de ley
Aunque no suele ser el caso, las personas subcontratadas tienen exactamente los mismos derechos que el resto de los trabajadores. Se debe poder generar antigüedad, tener seguro social, pagar aguinaldo, Afore, Infonavit y hasta vacaciones con prima vacacional.
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Documentación legal
El tema complicado con el outsourcing es que quien firma un contrato puede ser una empresa diferente a aquella en la que trabajas en realidad. Sin embargo, el artículo 15-B determina que la empresa subcontratada debe tener toda la documentación legal, así como recursos suficientes para cumplir con sus obligaciones, que son las de cualquier otro trabajador de México.
Que el salario coincida con el seguro
Como lo explicó Luisa María Alcalde Luján, titular de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, una de las prácticas ilegales más comunes del outsourcing es registrar a los trabajadores en el Seguro Social con un sueldo mucho menor al real. Es el derecho de todos los trabajadores que no sea así en ningún momento.
Tareas especiales
El concepto del outsourcing nació para cumplir con labores muy específicas. Se supondría que quien esté contratado de esta forma, debe realizar servicios especializados, es decir, tareas diferentes a las que realizan los trabajadores contratados de manera normal por la empresa.
Contrato escrito
Seguramente no leíste la letra pequeña y es aquí donde se cometen los peores abusos. El estar contratado por outsourcing requiere de un contrato escrito, el cual debe incluir todo lo antes mencionado. No olvides exigirlo y no firmar nada si no estás de acuerdo, o si pretenden incumplir con los derechos básicos de cualquier trabajo. Las obligaciones deben quedar por escrito.