• Entre más cabezas, hay más ideas, más innovación y más posibilidades de un mejor resultado.

• La diversidad es una herramienta de crecimiento que ayuda a que una empresa sea capaz de dar muchas respuestas.

• Entender las necesidades de muchos, es una característica esencial para sobrevivir en un mercado lleno de nuevos negocios.

Vivimos en un mundo diverso y tenemos que aprender a convivir con sus diferentes caras y puntos de vista. Muchas polémicas recientes han resaltado la importancia de aceptar a las personas sin importar su raza, preferencia sexual, género o nacionalidad. Esto es algo relevante tanto en la vida cotidiana como en el ambiente laboral. El área de recursos humanos debe conocer los beneficios de un grupo diverso de trabajadores, cada uno con habilidades y hasta culturas que lo distingan. Pero cuidado, que esto no significa simplemente contratar a cualquier persona.

Muchas cabezas

Cada área de trabajo requiere de habilidades especiales, haciendo de la diversidad una especie de requisito en cualquier empresa. Sin embargo, resulta importante diferenciar entre “diversidad” e “inclusión”. Ésta última incluye los prejuicios en torno a un grupo de personas, formas de pensar que podrían impedirle oportunidades a alguien de desempeñar su potencial al máximo. El área de recursos humanos debe aprender a ver estos factores en el proceso de contratación y sacarles provecho.

Para conseguir un objetivo, se requiere de planeación y para llevarla a cabo se necesitan ideas. Entre más cabezas, hay más posibilidades de un mejor resultado. Tener un equipo con intereses y gustos variados, crea un buen caldo de cultivo para la innovación e impulsa a pensar “fuera de la caja”. Cada individuo aporta algo y en conjunto pueden crear un panorama siempre listo para los cambios y con capacidad rápida para accionar.

Para muchos responsables de recursos humanos, se vuelve una tarea difícil elegir al empleado correcto más allá de sus habilidades técnicas. La experiencia, incluso fuera del trabajo, es una característica con especial importancia. Diversos testimonios aseguran que una forma de pensar abierta y con capacidad para entender varios puntos de vista, resultan en un mejor desempeño para casi cualquier empleo. Factores como actividades de ocio, los deportes que le interesan o los temas del mundo que le inquietan, importan al momento de contratar a alguien.

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Responsabilidad social

No es mentira que existen sectores de la población que suelen ser excluidos de muchos trabajos. Es aquí donde entra la importancia de la inclusión en las políticas de la empresa. Un trabajo socialmente responsable, puede implementar programas para apoyar a grupos vulnerables y así ser algo más que una gran cadena de producción. Una empresa que comprende al otro y entiende que vive en un mundo con diversas capacidades y necesidades, habla de un ambiente más respetuoso y motivante para sus elementos.

La diversidad es también una herramienta de crecimiento, puesto que ayuda a que una empresa sea capaz de dar muchas respuestas, ampliando su mercado y visión. Entender las necesidades de muchos, es una característica esencial para sobrevivir en un mercado lleno de nuevos negocios que crecen día con día, ayudados de las nuevas tecnologías

Todos vivimos en una comunidad y buscar empoderarla nos fortalece. Trabajar con el recurso humano, requiere una visión amplia del concepto de “comunidad” y toma en cuenta a todos sus integrantes. Más allá de una simple regla, la diversidad en el equipo de trabajo, enriquece el mismo entorno en que se desarrolla una empresa, creando un terreno en el que la producción y el consumo puedan ser más favorables para todos. Finalmente, todo se sostiene en una sociedad saludable.