Netflix se ha convertido en una pieza clave en temas de entretenimiento para el consumidor. Este lugar privilegiado le ha permitido generar un jugoso negocio alrededor de su servicio.
Una mirada a lo que pasa en el mercado mexicano puede dar cuenta del crecimiento que esta firma ha tenido a lo largo y ancho del mundo.
El streaming reina
A decir de los datos del Instituto Federal de Telecomunicaciones, en México ha poco más de 10 millones de suscriptores a este tipo de servicios, lo que se traduce en un alcance de más de 25 millones de personas.
El avance de este sector no sólo se mide en alcance; el tiempo usuario que es capaz de concentrar es importante y va en aumento.
Del total de los usuarios de estas plataformas, cuatro de cada diez ve un capítulo de una serie al día. La proporción incrementa a cinco de cada diez si del grupo de 25 a 34 años se trata.
En este juego Netflix es el ganador indiscutible. El servicio de Los Gatos, California ocupa entre el 80 y 90 por ciento de la cuota de mercado del país.
Así es importante mencionar que durante los últimos nuevos años, la cantidad de suscriptores sumados por el servicio de Los Gatos, California, se incrementaron en 797.42 por ciento al subir de 21.5 millones de abonados en el segundo trimestre de 2011 hasta los 192.95 millones en el mismo período de 2020.
Para ser más precisos, únicamente durante el primer trimestre de este año, Netflix sumó 10.09 millones de nuevos suscriptores en el mundo.
La regla de los 90 segundos
Si bien muchos factores han influido para que la plataforma alcance estos números, lo cierto es que gran parte de este éxito se debe a la sólida estrategia de marketing que está detrás de la plataforma, en donde la regla de los 90 segundos es crucial.
Luego de estudiar a sus usuarios, Netflix encontró que solo tiene 90 segundos para conseguir que el usuario que accede a su plataforma empiece a reproducir un contenido.
Si el cometido no se logra en este tiempo las posibilidades de que el tiempo del usuario se destine a otras plataformas o medios es alto, lo que de ninguna manera conviene al servicio.
Lo interesante sobre esta esta cifra no es el tempo que Netflix se ha puesto como limite para cautivar a sus espectadores, sino en cómo logra que más de uno se enganche en menos de ese minuto y medio.
Como la mayoría de las empresas tecnológicas en la actualidad, Netflix juega con el “recorrido del usuario” para anticiparse a sus deseos en función de sus presencias, lo que es especialmente valioso si se considera que las personas dedican 1.8 segundos para decir si ven o no cierto contenido.
El juego de la imagen
Esta información, es utilizada por la empresa de Los Gatos, California desde un terreno que va más allá de simplemente recomendar contenidos, la imagen con la presenta cada uno de estos títulos sugeridos es factor.
Ese fotograma, imagen u “obra de arte” como la denomina Netflix, influye más de un 80 por ciento en la decisión final del espectador, según un estudio interno de la plataforma, razón por la cual es modificada en función del propio perfil del consumidor.
Netflix no oculta esta categorización y asegura que esta estrategia fomenta el consumo de sus productos, con lo que cada vez considera cada vez más factores a la hora de diseñar las imágenes que ilustran los contenidos desde actores preferidos, país de consumo hasta gustos en función de género o categoría.
Este es un ejemplo más de cómo Netflix ha logrado capitalizar la data que tiene de sus usuarios para mantenerlos enganchados a su servicio.