Por Juan Cárdenas
Twitter: @Desautomatas
¿El mundo terminará este diciembre del 2012 como profetizaron los mayas (no los aztecas)? Supongo depende lo que cada uno imagine como fin del mundo. Si son gringos pensarán en un tsunami global, tormentas y volcanes, en donde sólo Bruce Willis sobrevive y la primera ciudad en ser destruida será New York. Si son católicos, no tienen problema porque no creen en profecías mayas (de hecho hicieron hasta lo imposible por acabar con cualquier otra religión del Continente, pero dejaron vivos a los arqueólogos y aquí estamos). Si son vegetarianos probablemente estén en paz y preparados para la venganza de la madre naturaleza. Y por su parte, los mayas veían este “fin del mundo” como un cambio físico del planeta (lo cual pienso poco a poco se está dando) y un cambio en la conciencia del Hombre.
Este último punto es el que me preocupa, México necesita más que nunca algo así, sin duda, pero a finales de año tendremos nuevo presidente… (sí, aunque sea mujer será presidente. No tiene nada que ver con género, simplemente gramática, buen uso del lenguaje, la forma verbal “Participio activo”). Lo cual significa que pasado el 22 de marzo (último día para registrarse oficialmente como candidatos a la presidencia del país ante el IFE), comenzaremos a recibir un cúmulo de información abrumadora. Y una vez que inicie el nuevo sexenio, si las cosas no van bien ni estamos preparados, podremos afrontar un fin del mundo empresarial, personal, individual, económico.
Mi preocupación radica en lo que han mostrado anteriormente los tres principales partidos a contender, una lección de cómo no comunicar lo importante, comunicando superficialidades. Un candidato representa el amor, o eso comenzó vendiendo. Yo no necesito amor, ni lo quiero de un presidente o gobernante, la verdad no me importa. Sí espero que ame algo en su vida pues de tal forma no será egoísta, ni por lo tanto corrupto. Pero del amor yo me encargo, no quiero una república amorosa, quiero para empezar una república, es decir Estados organizados y (verdaderamente) democráticos.
Otro representa el regreso. La vuelta a aquellas décadas de dominio corrupto. Y además está guapo… Aunque ni guapo esté, es como subirse al metro y buscar al menos feo, siempre van a encontrar uno y no significa que realmente les guste. Algo similar al Cheerleader Effect del programa “How I met your mother”. Y el partido en el poder mandará a una mujer… y ya, no sé qué más decir de ella, pero desafortunadamente no soy misógino, así que me importa poco que sea mujer, sino sus capacidades, las cuales no vi alguna mientras fungió como secretaria de gobierno.
¿Cómo podemos filtrar los detalles importantes? ¿Cómo captar el mensaje detrás de cada discurso? Siendo comunicólogos, empresarios, mercadólogos, creativos, y demás similares; deberíamos tener ciertas herramientas que nos permitieran hacerlo, y no sólo eso, poder comunicar lo que detectemos. Ser focos catalizadores o contenedores de sus mensajes. Y conste que no trato de motivarlos a votar por alguno en especial. Yo no lo haré, no creo en ninguno ni creo en votar por el menos peor. Eso me parece un símbolo de que la democracia es una ilusión. El “voto útil” es para mí una gran creación de mercado. Claro es útil, no para nosotros los ciudadanos, quienes ejercemos el voto, pero lo es para un partido. Es como elegir entre ser ahorcado, quemado, ahogado… no gracias.
Ni creo deban buscar los defectos o cualidades inmediatas para definir su voto. ¿Escoger por una mujer sólo porque es la primera mujer o demostrar que México está listo para ser gobernado por una mujer? Eso no significa nada, claro que estamos listos, a estas alturas todos lo sabemos, las mujeres son más inteligentes… pero también sabemos que no todas. Como no todos los de izquierda son nobles, solidarios o socialistas. Ni todos los tricolores son dinosaurios ni los guapos y jóvenes visionarios y buenos. Como ciudadano no me importa si un partido arruinó al país por décadas, no necesito ponerme contento por tener la primera presidente mujer de nuestra historia, o el primero de izquierda. El país tiene serios problemas como para buscar causas obvias.
¿Cómo prepararnos para digerir el cúmulo de información que estamos por recibir sin indigestarnos? Fácil, es justamente el inicio de la democracia: eligiéndolo. Basta que cada quien decida su nivel de compromiso, entonces podrán acceder a la información que quieran… o ninguna. De cada uno será responsabilidad cuánto conozcan de cada candidato, las redes sociales jugarán un papel significativo, podrán leer entrevistas, los detalles de su plataforma política, su equipo, propuestas, pasado, logros, fracasos, etc. O pueden ver la tele e ir a votar el 1o de Julio.
Mientras más conozcamos quienes son la cara de la campaña, podremos hacer más por una verdadera solución en nuestro universo y futuro inmediato, podremos planificar nuestro negocio, no se nos acabará el mundo, ni temeremos la profecía maya, al contrario, ayudaremos a que se cumpla. La solución no la trae ningún candidato ni partido, sino los ciudadanos, esa es la verdadera democracia, pero los beneficios traen responsabilidades. Si quieren ejercer el voto, ejerzan su ciudadanía, su elección.