Las estimaciones de la ONU dicen que cuando este año finalice, 230 millones de personas serán pobres en AL.
La ausencia de turismo en la región podría ser una de las causas de este desabasto financiero.
La zona atraviesa por una crisis que cada día se agudiza.
No solo infecciones y fallecimientos es lo que ha dejado la pandemia de coronavirus, sino una afectación económica muy grave. António Guterres, secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), menciona que el futuro se ve complicado para América Latina, uno de los territorios mas castigados por la emergencia sanitaria:
“Ello supone desarrollar sistemas integrales de bienestar social accesibles para todas las personas; implica crear sistemas tributarios más justos, promover la creación de empleos decentes, fortalecer la sostenibilidad ambiental y reforzar los mecanismos de protección social”, mencionó a propósito de la publicación El impacto de Covid-19 en América Latina y el Caribe.
Las estimaciones dicen que cuando este año finalice, 230 millones de personas serán pobres, es decir, uno de cada tres habitantes de América Latina. Por otro lado, unos 96 millones de habitantes no tendrán ingresos suficientes ni siquiera para comer. El aumento podría ser de 28 millones de personas más respecto a las cifras alcanzadas en 2019.
Para el caso de México, las cifras estiman que a finales de 2020, 50.3 por ciento de la población quedará en situación de pobreza y el 18.2 por ciento en pobreza extrema. En estos días en los que el semáforo naranja se ha vuelto tema de comentarios y polémicas, el país intenta rescatar la economía con la reapertura de negocios y plazas comerciales.
En el caso de las fuentes de empleo, unos 44 millones de latinoamericanos no tendrán trabajo para finales de año. Especialmente serán Brasil y México las regiones donde el panorama luce más desalentador, pues son los países que mayores casos de coronarias presentan en la actualidad.
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- El turismo: un gran responsable
Una de las principales causas de esta caída económica está relacionada a la ausencia de turismo en estas regiones. Hay una reducción del 35% en América del Sur y Centroamérica, y de un 39% en el Caribe, señala el informe de la ONU.
La asistencia mundial será de ayuda vital para que estas economías resurjan y puedan salir a flote. Ya desde un par de meses atrás, el director del Programa de Emergencias Sanitarias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Mike Ryan, decía que América Latina era el nuevo epicentro de la epidemia a nivel mundial, lo cual ha resultado en esta caída económica que se ve catastrófica para finales de este año.
Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva para la Comisión Económica de América Latina y el Caribe (CEPAL), menciona los importantes retos que la región deberá atravesar para resurgir: “Esta es una región que ya venía por siete años con un crecimiento muy bajo y con brechas estructurales y un modelo de desarrollo insostenible que se han exacerbado por una muy débil protección social, sistemas de salud fragmentados y profundas desigualdades,” dijo.
- Un panorama de retos constantes
La Organización Panamericana de la Salud reveló proyecciones que afirman que para el 1 de octubre América Latina y el Caribe tendrá más de 438.000 muertes por la pandemia.
“Bajo las condiciones actuales en América del Sur, países como Chile y Colombia verán el pico de casos de aquí a la mitad de julio, mientras que Argentina, Bolivia, Brasil y Perú, lo verán en algún momento de agosto”, informó su directora, Carissa Etienne.
