La presión sobre Facebook crece a medida que más anunciantes informan que retirarán sus inversiones publicitarias de la red social y de otras plataformas como una forma de pedir que se presenten cambios en busca de combatir la propagación de discursos de odio en estos escenarios; la más reciente, Starbucks.
El gigante del café dijo el fin de semana que suspenderá la publicidad en algunas plataformas siguiendo los pasos de otras trasnacionales como Coca-Cola y Unilever, que optan por hacer una revisión introspectiva sobre en qué ventanas y a través de qué canales desean que sus marcas sean exhibidas.
“Creemos en unir a las comunidades, tanto en persona como en línea”, dijo un portavoz de Starbucks en declaraciones a la BBC, al tiempo que añadió que la pausa servirá para sostener “conversaciones internas y con socios de medios y organizaciones de derechos civiles para detener la propagación del discurso de odio”.
Algo importante en el caso de la firma de Seattle, es que no desaparecerá la marca por completo, pues dijo que continuará publicando en las redes sociales sin promoción pagada.
Una marca de peso
Se trata de una de las firmas de presencia global con un poderoso engagement entre los consumidores, y aunque pueden rechazarla, simplemente consumirla o incluso amarla, el punto es que cuando firmas como Starbucks y Coca-Cola dicen algo, esto es escuchado y tiene un efecto.
Para Facebook esto no es bueno, el llamado realizado por las distintas organizaciones que convocaron la campaña #StopHateforProfit en respuesta a lo que, acusan, la de Menlo Park no ha hecho lo suficiente para detener el discurso de odio y la desinformación, está creciendo.
Sólo en el caso de Starbucks, durante 2018 invirtió en publicidad alrededor de 79 millones en Estados Unidos, de acuerdo con datos de Kantar, mientras que a nivel global, el año pasado destinó cerca de 246 millones de dólares, según cifras de la propia compañía.
Aunque no se tiene detalle sobre cuánto de este monto fue para redes sociales, hay que considerar que el año pasado el 45 por ciento de la inversión publicitaria a nivel mundial fue para internet.
Facebook tiene un problema
Y mayor, el sábado trascendió que el valor de capitalización de Facebook se redujo en 7 mil 200 millones de dólares derivado de que sus acciones cayeron más de 8 por ciento el viernes luego que se diera a conocer que Coca-Cola y Unilever retiraría su publicidad de la red social.
Pese a que Mark Zuckerberg dijo que haría algunos cambios en sus políticas y anunció nuevas reglas que en busca de hacer algo respecto al contenido considerado de odio, pero los críticos señalan que la compañía deja mucho espacio para la interpretación.
En un inicio el llamado a boicot fue lento pero a partir de que The North Face se pronunció, la lista ha crecido, según diversas fuentes, son más de 90 empresas han detenido la publicidad en apoyo de #StopHateforProfit; entre ellas marcas globales como Coca-Cola, Diageo y Unilever que recientemente eliminaron la publicidad de las plataformas sociales.