A medida que el numere de restaurantes y servicios de comida permanecen cerrados o con operaciones limitadas, muchos consumidores han buscado replicar sus productos y alimentos preferidos desde casa, algunas afirmas como Burger King, Disney y KFC han buscado dar respuesta a esta inquietud.
Derivado del distanciamiento social motivado por la pandemia de coronavirus COVID-19 y a las reducción considerable de la activad económica, las versiones caseras de McMuffins, Big Macs, Whopper o el grilled cheese sandwich del Woody’s Lunch Box.
Aunque marcas como Burger King han compartido su receta para que los consumidores puedan replicar sus hamburguesas preferidas en sus hogares -esto sucedió en Francia-, hay otras marcas que, en lugar de compartir sus conocimientos (o secretos de cocina) han optado por ‘trollear’ a los consumidores.
El humor ácido de KFC
Tal es el caso de KFC en Reino Unido e Irlanda, que en durante la última semana solicitó a los fans que compartieran sus intentos de recreación de su famoso pollo frito a través de redes sociales junto con el hashtag #RateMyKFC, para que ellos calificaran sus esfuerzos.
Lo interesante es que la marca del Coronel Sanders comenzó a burlarse de lo que compartían los usuarios en Twitter, aunque les daba una puntuación de diez por el esfuerzo. Más interesante aún es que es una estrategia que le ha funcionado pues en lugar de encontrar rechazo, ha generado hilaridad entre sus seguidores.
La clave de esto es el lenguaje empleado por el equipo de social media de KFC que, pese a ser algo ácido y con una carga de humor negro, no cae en ofensas o descalificaciones y agresiones en contra de los consumidores, por el contrario, motiva una interacción muy abierta.
Looks a bit too crispy 7.5/10
— Macho Man Sandy Ravage (@therealstewil) April 8, 2020
This is the saddest thing I’ve seen and I’ve watched the Futurama episode were the dog waits outside for Fry. 3/10. #RateMyKFC https://t.co/RGmSRgXliK
— KFC UK & Ireland (@KFC_UKI) April 7, 2020
¿Falta de tacto?
La respuesta debe ser no. Ciertamente a medida que la pandemia del coronavirus ah provocado un mayor número de contagios, y el número de muertes, es muy natural que la población en diferentes países puede estar atemorizados, impresionados y muy sensibles.
Entonces, emitir este tipo de mensajes hasta cierto punto impertinentes, podría provocar la ira del consumidor, ya se han dado casos con otras marcas incluso en situaciones que no son tan delicadas como la que enfrentamos actualmente. En el caso de KFC y, particularmente con el consumidor de las islas británicas parece tener cierta resistencia y aceptación con este estilo de humor.
Al hacer la revisión de las respuestas en varias publicaciones, no se observaron quejas, por el contrario, los consumidores continuaron comentando con el mismo tono que la marca, por lo que se puede concluir que están abiertos a participar en este tipo de dinámicas que, hasta cierto punto, es una forma de entretenimiento y un recurso para romper con la monotonía en la que uno se inmersa ante la sala de actividad.
I think you have dandruff.
Chicken is good but no need for the 12th ingredient. 7/10 #RateMyKFC https://t.co/H08D7vd9RV
— KFC UK & Ireland (@KFC_UKI) April 8, 2020
Man I agree but Idc when their Twitter is this good ?
— ◾️Patrick (@BornSlippy96) April 8, 2020
Dylan. I know you’re proud of this. I can tell by the three times you’ve sent it in. I’ll be honest, it looks bloody tasty…BUT, the coverage is more patchy than Joseph’s technicolor dream coat. That means it’s a 7.5/10 from me #RateMyKFC https://t.co/ziNTsznc3u
— KFC UK & Ireland (@KFC_UKI) April 8, 2020
— goose (@goosemoosey) April 8, 2020
El humor es útil para las marcas
No es la única vez que KFC emplea este estilo en sus acciones de marketing digital, recordamos cuando bromeó con hamburguesa de coliflor, a manera de ‘trolleo’ a los consumidores veganos. En aquel momento, también encontró una respuesta positiva por parte del consumidor.
Este estilo lo sabe manejar muy bien Netflix, es muy común que veamos en sus acciones en redes sociales donde fomenta la interacción con su comunidad y, en más de una ocasión, suele utilizar respuestas ácidas e incluso burlonas hacia los seguidores que, más que molestarse, entienden la dinámica con humor y suelen hacer crecer la conversación.