Cierres masivos y baja afluencia de clientes son algunos de los problemas que la pandemia trajo para el sector retail.
Si bien muchos de sus jugadores se mantienen activos aún con las medidas de confinamiento impuestas por las autoridades, la realidad es que para el sector las pérdidas económicas se calculan en millones.
Las cifras no mienten
Para darnos una idea de contexto, estimaciones de Statista indican que el 74.6 por ciento de los consumidores en Estados Unidos, por ejemplo, ha evitado ir a los centros comerciales y un 52.7 por ciento a las tiendas físicas en general durante las últimas dos semanas.
Asimismo, en el mercado mexicano, aunque al inicio del brote las tiendas minoristas reportaron un incremento, este escenario duró poco.
Cuando menos así lo refiere Leslie Alonso, gerente de operaciones de Pabis Retail, quien dentro de un informe entregado por dicha compañía aseguró que luego de las compras de pánico -realizada en el país durante la semana del 16 de marzo-, las ventas entre los minoristas han caído.
“Este factor es claro interpretarlo pues en esa semana las ventas de diferentes categorías crecieron en promedio 97.5 por ciento y los inventarios cayeron 65 por ciento”, según Leslie Alonso.
Entre abasto y medidas de sanidad
Lo cierto es que para la industria minorista, el problema no sólo se encuentra en la pasividad (obligada) del shopper final.
Toda la cadena de producción, en menor o mayor medida, se ha visto afectada, lo que supone retos importantes a mediano y largo plazo para el sector.
Aunque en Latinoamérica el 75 por ciento de los autoservicios asegura tener el abastecimiento suficiente para cubrir las necesidades de los clientes, a decir de datos recientes de Nielsen, lo cierto es que a causa de la pandemia han tenido que tomar medidas que, por un lado, buscan cuidar la salud de sus visitantes y empleados, pero que por otro pretenden mantener el abasto en productos. De acuerdo con la consultora:
- El 64 por ciento de las tiendas de autoservicio opta por restringir los aforos en el punto de venta
- El 55 por ciento apuesta por restricción en cantidad de productos
- El 60 por ciento aumentó logística para domicilios
- El 59 por ciento exigió a clientes de medidas protección
4 grandes retos a futuro para el retail
Considerando estos movimiento y el hecho de que la pandemia aún no está controlada, la consultora enumera cuatro grandes retos que las firmas relacionadas con el sector retail deberán de afrontar al mediano y largo plazo en medio de la contingencia sanitaria
Quiebre de stocks
La cadena de suministro no estaba preparada para la alta demanda de ciertos productos que, en su mayoría no forman parte de las compras básicas de los clientes o de categorías de alta rotación.
La alta demanda de productos como desinfectantes, de protección personal y productos frescos podría traducirse en un quiebre en los stocks disponibles.
Presión en la cadena
En la misma línea, la alta demanda y un abasto que luce cuando menos limitado podría generar una importante presión en la cadena de suministros. Los jugadores se verana en la necesidad de entrega de productos sin alteración de precios, con un costo de distribución más alto y complejo dada la contigencia.
Sin mano de obra
Aunque muchos puntos de venta se mantienen cerrados, lo cierto es que otros canales están ganando fuerza, especialmente aquellos relacionados con la compra en línea. Con el crecimiento de estos canales, es posible que en algún momento la mano de obra para el reparto de productos al consumidor final se vea carente.
Más costos
Además de los costos de operación propios de un minorista, las medidas de prevención y cuidado del personal y el shopper exigirá costos extra relacionados con la desinfección en tiendas y la entrega de insumos para procurar el bienestar de los colaboradores, mismos que se traducirán, cuando menos por algunos meses, en gastos fijos.