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La firma de inversión señala que muchos dividendos se recortarán o suspenderán por el resto del año
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El indicador S&P 500 es victo como el más representativo del estado real del mercado de Estados Unidos
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Algunas de las compañías que conforman este grupo son Accenture, eBay, McDonald’s, Salesforce, Visa y Walmart
En términos generales y durante momentos normales, la inversión es una buena forma de incrementar la riqueza de los individuos. No solo eso, sino que también permite que muchas empresas puedan continuar obteniendo recursos para sus actividades productivas. Pero, a raíz de la pandemia por la COVID-19, el mercado de valores está de cabeza. Y los más afectados, serán quienes tengan acciones de las otrora compañías más valiosas y redituables del mundo.
Al menos así lo teme Goldman Sachs, de acuerdo con Reuters. La institución financiera acaba de anunciar que espera que las acciones de las empresas dentro del S&P 500 dejen de ser tan atractivas como lo eran hace unos meses. En específico, espera que la inversión que hicieron individuos y organizaciones en títulos que pagaban dividendos sea menos atractiva. Esto, por que estos beneficios adicionales dejarían de ser tan cuantiosos para lo que resta del 2020.
De acuerdo con Goldman Sachs, en promedio, los dividendos que pagan las compañías del S&P 500 serían 25 por ciento más bajos para finales del 2020. De acuerdo con la institución financiera, este menor atractivo para la inversión en estos títulos responde a que las marcas ya no podrán pedir créditos con tanta frecuencia. Antes, era usual que las marcas usaran estas facilidades para fondear pagos a accionistas. Con la crisis de la COVID-19, será más difícil.
Lecciones de inversión en tiempos de crisis
Por supuesto, hay otras preocupaciones económicas ante la situación que ha desatado la enfermedad originaria de China. Agencias y mercadólogos temen un mal año, a medida que grandes marcas como Coca-Cola anuncian recortes a su inversión publicitaria. Asimismo, en el caso de grandes organizaciones como Amazon, parecen atrapadas entre responder a la epidemia o arriesgar a su personal. Eso sin contar la suspensión de varios cuantiosos eventos.
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Esta advertencia de inversión de Goldman Sachs no es tan sorprendente. Los dividendos son solo un indicador de la rentabilidad del negocio en cuestión, que se refleja en ganancias para los agentes involucrados. Ante la crisis por la COVID-19, el panorama de muchos negocios es más bien oscuro. Algunas empresas, incluyendo aquellas que cotizan en la bolsa, ni siquiera saben si podrán sobrevivir a la pandemia y al cambio en hábitos de consumo que provoque.
Al mismo tiempo, la suspensión (parcial o total) de dividendos de parte de las empresas podría ser el mejor indicador de una compañía que sobrevivirá fuerte a la pandemia. Por ahora, las marcas tienen que ahorrar cada centavo para poder pasar por este momento difícil. Una vez que las cosas recuperen cierta normalidad, entonces pueden reanudar el pago a accionistas. A no muchos les gustará esta decisión en el corto plazo, pero es lo más sensible para el futuro.
Superando la crisis económica
Ya es casi una certeza que el resto del 2020 y posiblemente algunos meses de 2021 serán de una intensa lucha por la estabilidad financiera global. El Fondo Monetario Internacional dijo hace un par de días que el planeta había entrado oficialmente en recesión. Asimismo, más de un experto en inversión ha previsto una crisis peor que la de 2008. Incluso en industrias que en apariencia eran eternas, como el retail, se ven cambios radicales potencialmente permanentes.
¿Cómo se puede tratar de superar estas malas expectativas económicas y de inversión a corto y mediano plazo? Por desgracia, muchas de las visiones que hay en el mercado son negativas. De acuerdo con Forbes, hay tres escenarios de recuperación, todos ellos con secuelas graves. En datos de The Guardian, la velocidad con la que se presentó la crisis anticipa un futuro muy desagradable. Y según el WSJ, incluso revela fallas previas al sistema financiero internacional.