La gigante de Burbank sorprendió el martes a más de uno y, de paso, asustó a Mickey Mouse al dar a conocer que Bob Iger presentó su denuncia como CEO de Walt Disney Co., tras quince años en el puesto.
Ciertamente hablamos de una de las empresas en la industria del entretenimiento con mayor capacidad de generación de contenidos y poder económico, pero, pese a que se designó rápidamente a Bob Chapek, un veterano de 27 años de la compañía, actual responsable de Parques, Experiencias y Productos de Disney como nuevo CEO, existen dudas sobre el futuro.
El creador de un monstruo
Pese a que se habían reportado en diversas ocasiones amagos por parte de Bob Iger para dejar su cargo, la noticia de ayer sorprendió a todos.
Y, es que más allá del tiempo que el ejecutivo estuvo al frente de la compañía, hablamos de quien es señalado como el principal responsable de construir el monstruo de la industria del entretenimiento que actualmente es Disney.
Con Iger al frente, se hicieron adquisiciones históricas como Pixar, Lucasfilm (Star Wars), Marvel Entertainment y 21st Century Fox, a excepción de la última compra, todas han sido fundamentales para el crecimiento en la industria y fuentes del crecimiento de los ingresos de la compañía.
Para ser claros, durante su gestión, las ganancias de Disney crecieron un 300 por ciento y sus acciones se han incrementado un 400 por ciento en el mismo periodo, según recuerdan desde Fortune. No es para menos, sólo las producciones cinematográficas ingresó alrededor de 10 mil millones de dólares, sólo por concepto de las taquillas de películas como Avengers: Endgame, Spider-Man: Far from Home (esta con Sony Pictures), Captain Marvel, Frozen II, El Rey León y Toy Story 4, entre otras.
Esto sin considerar que Iger ha sido clave para el lanzamiento de Disney+, impulsar el MCU a las series y de llevarlo a experiencias en los parques de atracciones.
Los números están de su lado
Bajo su administración, Disney pasó de reportar ingresos netos de 3 mil 300 millones de dólares en 2006, a alcanzar un tope de 12 mil 600 millones en 2018.
Si bien, en 2019 tuvo una caída significativa al informar 10 mil 440 millones de dólares, esto no se debe a una falta de eficiencia y efectividad de la compañía, sino que se atribuye a la integración de 21st Century Fox, una transacción valuada en 71 mil millones de dólares.
Para ser más claros, durante el mismo periodo (2006-2019), la casa de Mickey Mouse pasó de reportar ganancias de 33 mil 750 millones, hasta la estratosférica cifra de 69 mil 570 millones, según sus propios reportes financieros.
Iger ha sido clave en la administración de recursos, la búsqueda y desarrollo de todas las divisiones de negocios y, de hacer aún más trascendental a Disney como la reina contadora de historias; algo que ha sido señalado como fundamental para su éxito, por más de un alto ejecutivo de la compañía.
Un panorama incierto
Aunque la silla de CEO será ocupada por alguien de mucha experiencia como Bob Chapek, capitán de la división de Parques, experiencias y productos, la más rentable de la gigante de Burbank, el movimiento ha despertado dudas.
Sumado al hecho referido más arriba en la que Iger ha aportado mucho para reforzar esta división, tenemos que Media networks y la de los Estudios cinematográficos, son las que más han crecido en los últimos años.
No obstante, y pese a la suma del potencial de Fox, sin una dirección adecuada, ambas podrían reducir su rentabilidad. Razones hay varias; aunque en el caso de Marvel Studios, seguirán contando con Kevin Feige, no es un secreto que tras Avengers: Endgame, los personajes de gran engagement y atractivo en taquillas ha disminuido considerablemente.
También hay que considerar el hecho de que sus rivales han seguido una estrategia similar, apostar por fusiones o adquisiciones para crecer en músculo y campo de acción; NBCUniversal (de Comcast), Warner Media (de AT&T) y ViacomCBS, Inc. son el mejor ejemplo… y esto sin olvidar a Netflix que, en el mercado de streaming será un rival duro a vencer.
Y, no podemos olvidar las advertencias que ha hecho recientemente la compañía por las consecuencias del coronavirus, mismas que podrían representar hasta 280 millones de dólares y el posible cese de más de 10 mil empleados.
Es decir, no se duda de las capacidades de Bob Chapek para estar al frente del imperio de Mickey Mouse, pero es indudable que tiene ante sí, una tarea titánica que mantener y, más aún, hacer crecer.
Tal vez por eso la reacción de los mercados bursátiles, pues las acciones de Disney llegaron a caer casi 4 por ciento en las operaciones tras cierre en el índice NYSE, de la Bolsa de Nueva York.