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Se espera que estas nuevas medidas de seguridad ya estén activas en EEUU a partir de hoy mismo
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Al mismo tiempo, Tinder no dijo cuándo podrían aplicarse en México u otros territorios fuera Norteamérica
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Es incierto si Match Group, dueña de la plataforma, también llevará estos proyectos a sus otras apps
Prácticamente todas las plataformas digitales luchan por establecer estándares suficientes de seguridad en sus aplicaciones. Y es que se han registrado un sinfín de incidentes. Xiaomi, por un error de programación, dejó que otros usuarios vieran las cámaras de otros consumidores. TikTok, por su parte, habría dejado expuestos los perfiles de prácticamente todos los usuarios. Varios reportes aseguran que los coches de Tesla aceleran sin indicación de los conductores. Y han acusado a redes como Grindr de compartir los datos sensibles de la gente con Twitter.
En este sentido, hay una multitud de retos de seguridad que amenazan a empresas y personas por igual en el mundo digital. De acuerdo con Educba, hay gran preocupación por el software que infecta sistemas pasando desapercibidos y esperan el peor momento para atacar. Ubuntu Pit apunta que hay temor por lo que pueden hacer agentes maliciosos con Machine Learning. Read IT Quick asegura que cloud computing e Internet de las Cosas serán un dolor de cabeza.
Al mismo tiempo, no todas las amenazas de seguridad en el mundo digital representan solo un riesgo en línea para la gente. Gracias a que varias plataformas conectan a los individuos en el espacio físico (como sucede en economía compartida), también hay peligros en este contexto. Ya existen un sinfín de ejemplos en Uber, con su reporte de agresiones y abusos sexuales solo en Estados Unidos (EEUU). Pero hay otros proyectos que también comparten estos desafíos.
Tinder agrega nuevas funciones de seguridad
De acuerdo con la BBC, una de las plataformas líderes entre las apps de citas quiere hacer más por proteger la seguridad de sus usuarios. Así, Tinder habría agregado dos herramientas nuevas para el público. La primera es un botón de pánico que permitiría solicitar la ayuda de los servicios de emergencia. Antes de iniciar una cita, se deben meter datos específicos sobre la persona y dónde ocurrirá el encuentro. Si algo llega a suceder, se avisaría a las autoridades.
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Asimismo, se agregó un sistema de verificación de perfiles. Se espera que Tinder solicite de vez en cuando que usuarios se tomen selfies en el momento. Con tecnología de Inteligencia Artificial, se verificaría la identidad de las personas al compararlas con las fotos subidas. De esta forma, se espera reforzar las medidas de seguridad contra el llamado catfishing. Esta práctica es muy utilizada por agentes maliciosos para hacerse pasar por otras personas.
¿Una medida adecuada o suficiente?
No es la primera vez que una plataforma digital realiza cambios a su servicio para reducir la incidencia de accidentes o agresiones físicas. Airbnb, durante octubre pasado, sufrió tanto un tiroteo como un robo a mano armada en dos de sus propiedades. Lo anterior forzó a la marca a rediseñar sus políticas de seguridad dentro de Estados Unidos (EEUU) y a escala global. Por su parte, Cabify anunció su conexión al sistema C5 de la Ciudad de México (CDMX) en 2019.
Las medidas de seguridad de Tinder parecen ser una buena respuesta para la cantidad de incidentes que están relacionados con las plataformas digitales. Un sistema de emergencia que funcione a partir de la misma app es una gran forma de cumplir con la responsabilidad de la compañía con la sociedad. Al mismo tiempo, podría no ser suficiente. En caso de un real incidente físico, tal vez será muy difícil que una persona desbloquee para lograr pedir ayuda.
Por otro lado, está el desafío de la internacionalización y respuesta del servicio de seguridad. Tinder no solo tiene que firmar acuerdos con las fuerzas del orden en prácticamente todos los lugares en los que opera para que su iniciativa tenga los resultados deseados. Además, tiene que cerciorarse que, cuando sus usuarios pidan la ayuda, ésta llegue en el tiempo y forma más adecuados. Algo que es un reto incluso fuera del sector de las plataformas móviles y digitales.