Las distracciones en el trabajo son algo con que los empleados tienen que luchar día a día para que su productividad no se vea reducida. A veces, por más esfuerzo que se haga, estas no se pueden evitar del todo y suele costar mucho esfuerzo volver a enfocarte en tus tareas laborales. Básicamente, se puede definir una distracción como “una falta de atención habitual o momentánea sobre las cosas de las que normalmente debería ocuparse una persona”.
Las distracciones afectan a todos y no importa el tipo de trabajo al que te tengas que enfrentar. Aunque es cierto que hay elementos distractores que debes controlar para así poder tener un mejor desempeño en tu trabajo. Todo influye a la hora de potenciar las distracciones, así que, a continuación, te vamos a ofrecer una serie de consejos para poder evitarlas y concentrarte mejor en tu trabajo.
1. – Límites a tu entorno directo
Es decir, pide no ser interrumpido. Por ejemplo, puedes colocar un cartel en la puerta de la oficina y si trabajas en espacios comunes, puedes colocarte unos auriculares con música suave estimulante para tu cerebro. Seguro que tu enfoque funciona mucho mejor.
2.- Seguimiento de tus tareas pendientes
Una vez a la semana, haz una lista completa con tus tareas pendientes, dividida por áreas, de todos los temas que tengas en curso. Prioriza estas tareas marcándolas en orden de importancia. Puedes delegar todo lo que puedas y destinar el tiempo suficiente para plantarle cara a estas tareas hasta así tener tu lista de pendientes limpia y totalmente actualizada.
3.- De lo complejo a lo simple
Aunque te cueste, debes a hacer las tareas más complejas por la mañana ya que es cuando, por lo general, estás más dispuesto a completarlas y así no dejarás círculos abiertos para otro momento.
4.- El orden de los documentos es muy importante
Sin duda alguna, el desorden externo es un reflejo del caos interno. Así que, a mayor orden en tu escritorio, mejores resultados obtendrás en términos de productividad. Establece cada cierto tiempo en tu agenda para hacer un orden completo y limpieza total (por ejemplo cada 6 meses). Verás que tu energía se renueva completamente y afrontas mejor tu trabajo.
5.- Correo electrónico y llamadas telefónicas no a todas horas
Intenta desconectarte periódicamente de la necesidad casi automática que tenemos de revisar el correo electrónico a cada rato. Esto te evitará muchas distracciones, sobre todo cuando recibes malas noticias ya que cambia tu energía y, consecuentemente, las distracciones aumentarán.
Asimismo, debes tener un control exhaustivo de tus llamadas telefónicas. Si estás trabajando, debes intentar activar el buzón de voz y luego dediques un tiempo a responder a las llamadas pendientes que tengas. Por si no lo sabías, el teléfono, al igual que el correo electrónico, las redes sociales y las interrupciones de tus compañeros de trabajo, son las cuatro causas más frecuentes de distracciones en el trabajo.