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El país con más usuarios de Facebook en todo el mundo es India, donde la cifra asciende a 300 millones de personas
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Se estima que la red social tiene unas 90 millones de páginas de negocio, así como siete millones de anunciantes activos
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Para 2017, ya el 49 por ciento de los mercadólogos planeaba emplear la plataforma para fines de negocio
Cada una de las redes sociales disponibles a las empresas tienen diferentes características. Esto les permite a las marcas generar mensajes especializados para audiencias específicas. Por ejemplo, LinkedIn, por su perfil más profesional, es perfecto para implementaciones B2B. Twitter, por su apuesta al contenido, es ideal para la industria del entretenimiento. Y por su mismo entorno, en Instagram florece el influencer marketing. Pero Facebook es caso aparte.
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A lo largo de los años, Facebook se ha convertido en la red social más general y amplia de todo el mundo. De acuerdo con Statista, es la plataforma más popular del mundo en su sector con más de dos mil 375 millones de usuarios. Este número, de acuerdo con Zariance, sube a una velocidad notablemente alta, con un ritmo de 500 mil nuevos perfiles cada día. Según Invesp, el sitio abarca por sí solo cerca de una décima parte del gasto digital a escala global.
Estas estadísticas podrían sugerir que Facebook es una de las herramientas más valiosas de las marcas en todo el mundo. Si bien esta afirmación es cierta, no necesariamente significa que las empresas estén sacándole el máximo provecho posible. Hubspot apunta que no todas las compañías están ejecutando sus estrategias en la página con la mayor precisión posible. Esto porque a muchos negocios les faltan implementar cinco buenas prácticas de marketing:
Desarrollar contenido en Facebook que enganche
La mayor recomendación que se le puede dar a las marcas cuando trabajan en esta red social es apostar por la calidad de sus recursos. El viejo dicho de “el contenido es rey” no solo aplica para blogs o el sitio web de la empresa. Es fundamental que cada video, publicación, imagen y dinámica esté perfectamente diseñada para motivar a la audiencia a interactuar con la marca. De lo contrario, no se puede explotar su potencial como canal para obtener nuevos clientes.
Interactuar con los seguidores
Tal y como su nombre lo indica, las redes sociales se basan en un sentido de comunidad. En este sentido, es importante que las empresas tengan una dinámica activa con las personas con las que se conectan a través de Facebook. Este ir y venir no solo demuestra al público que la marca está dispuesta a recibir retroalimentación y escuchar las preocupaciones de su audiencia. También ayuda a incrementar la tasa de “enganche” tanto de posts y campañas.
Apostar por grupos de Facebook
En los últimos meses, la red social ha invertido significativamente en revalorizar el atractivo de estas herramientas. Así pues, es el mejor momento para que las marcas prueben esta utilidad del sitio. No solo pueden crear una comunidad mucho más exclusiva e íntima, donde se compartan cosas que no estén disponibles al resto de la audiencia. Además, se pueden explorar otros grupos para tratar de detectar posibles públicos que puedan volverse clientes.
Dejar de promover el producto una y otra vez
Una vez más, Facebook es una experiencia principalmente social. Aunque las personas saben que están interactuando con una marca con claras intenciones comerciales, no significa que estén abiertos a simplemente consumir anuncios. Al contrario, la mayor parte de la audiencia se va a sentir alienada si las empresas simplemente hacen publicidad a productos y servicios. Hay que mostrar a las personas y seguidores que hay algo más allá de las metas de negocio.
Reducir la necesidad de salir de Facebook
Zuckerberg y compañía han trabajado arduamente por lograr una experiencia que motive a los usuarios a quedarse el mayor tiempo posible dentro de la red social. Si bien parecería una buena idea que las empresas solo usaran esta plataforma como un lugar de paso hacia sus propios canales, también hay ventajas de seguir la corriente. Al final, la empresa ha creado varias utilidades para permitir a las empresas vender directamente sus servicios y productos.