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El desempeño de los millennials como recurso humano se ha especializado en los soft skills, la gran diferencia en cualquier área en que se desempeñan.
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La gestión de talento se enfoca mucho en descubrir las habilidades de cada generación que integra sus departamentos.
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El interés que han encontrado las organizaciones en invertir en el talento con el que cuentan, les ha permitido desarrollar tendencias en recursos humanos.
La gestión de talento es una empresa de alto desempeño, por el impacto que tiene en los resultados que cada uno de los departamentos en estas organizaciones alcanzan, así como el valor que las tendencias que imponen tienen, para el resto de los competidores.
Dicho esto es indispensable descubrir el rol que deben de asumir las áreas de recursos humanos y los profesionales, pues no solo se trata de la forma en que una empresa genera e impulsa las habilidades de sus integrantes, también se trata de contar con los perfiles adecuados para la demanda de la industria y la actualización es fundamental.
En medio de estos insights que podemos observar en el mercado y que nos advierte el papel que juegan los talentos de los profesionales, ha surgido un estudio que advierte las limitantes que tienen los millennials dentro de una organización.
De acuerdo a resultados proyectados por Hunt Scanlon, la firma encontró que los millennials se sienten incapaces de dirigir a otros miembros del equipo y de trabajar con personas mayores.
La brecha generacional y la perspectiva con que ahora rehuyen a esquemas directivos basados en las jerarquías están dando paso a una transformación en toda el área de recursos humanos, pero también están dando la oportunidad de entender a las diversas generaciones que integran a una organización y saber con base en ello las mejores áreas en que se van a desempeñar y las acciones que van a implementar para llegar a objetivos