-
El nuevo servicio parece un seguimiento al Ride Pass, otro plan de suscripción presentado el año pasado
-
Durante su IPO, Uber perdió mĆ”s de 627 millones de dólares en su primer dĆa en la bolsa
-
Capturas de pantalla de la nueva suscripción dan a entender que el servicio también incluye un seguro de viaje
Los servicios de suscripción tienen varias ventajas por encima de los modelos pago-por-producto. AsĆ, las marcas pueden fomentar a que se forme una lealtad hacia sus productos y ofertas. El modelo es particularmente popular en mercados como el streaming de contenidos. Sin embargo, lentamente se ha colado a otros segmentos, como el de ecommerce. Ahora Uber tambiĆ©n quiere traerlo a su modelo de negocio.
TechCrunch reportó que Uber estĆ” empezando a probar un nuevo modelo de suscripción en San Francisco y Chicago. La tecnológica ofrecerĆa descuentos fijos en todos los viajes en taxis compartidos, asĆ como entregas gratuitas en Eats. TambiĆ©n permitirĆa a los usuarios utilizar sus bicicletas y scooters gratuitamente. El plan tendrĆa un costo de casi 25 dólares al mes.
Nuevas formas de monetización para Uber
Esta tecnológica no es la única que ha pensado en un servicio de suscripción para hacer llegar sus ofertas a un público mÔs amplio. Amazon, con su versión Prime, lleva años tratando de ofrecer un plan que, literalmente, ofrezca todo a los consumidores. Mozilla también considera este modelo como una estrategia viable para diversificar sus fuentes de ingreso. Incluso Walmart y Burger King lanzaron estas modalidades en sus respectivos mercados.
Pero la decisión de Uber, mĆ”s que para ofrecer nuevos conceptos a los clientes o fomentar el crecimiento de otras unidades de negocio, responde evidentemente a sus retos financieros. En su primer reporte trimestral como marca pĆŗblica, reveló que seguĆa desangrĆ”ndose en gastos. Es probable que la tecnológica haya inspirado su estrategia en otras marcas, como Spotify. Si bien la mayorĆa de sus usuarios son gratuitos, las suscripciones son su fuente de ingresos.
Tal vez en Estados Unidos, donde tiene virtualmente cero competencia, el modelo de suscripción podrĆa ser una buena adición a su oferta. Pero en mercados donde la movilidad estĆ” dividida entre varias marcas, como el caso mexicano, podrĆa no ser una idea tan efectiva. Entre mĆ”s opciones existen a los consumidores, menos dispuestos estĆ”n a comprometerse con una Ćŗnica marca. Y dado el calibre global de Uber, Ć©sta podrĆa ser la falla en su gran plan.