Una de las premisas que llegó con el mundo digital fue aquella que dicta que aunque las personas están más conectadas, suelen estar más solas. Esta tendencia, que parece ser una realidad, ha generado nuevas oportunidades de negocio que apps como The People Walker están capitalizando al cobrar por el alquiler de “paseadores de personas” hasta 41 dólares (804.42 pesos al tipo de cambio actual) por una caminata de una hora.
En mercados asiáticos, son comunes los servicios que alquilan “amigos” o “padres” para contrarrestar la soledad y ahora esta tendencia de negocio parece pisar fuerte en occidente.
¿”Paseadores” de personas?
El gran referente es The People Walker, servicio creado durante 2016 que opera en Los Ángeles, California y que nació luego de que Chuck McCarthy se le ocurriera un servicio para “pasear gente.
En un principio, la idea se promocionó con una camiseta, un perfil en Facebook y afiches pegados en postes y paredes de aquella ciudad en la que se ofrecía el servicio.
Ante el éxito, y tres los después, ahora la iniciativa cuenta con el apoyo de diversos inversionistas quienes contribuyeron para lanzar una aplicación sobre la peculiar propuesta.
Ahora mismo se trata de una aplicación que suma más de 200 proveedores “personas que cobran por caminar por extraños”.
La plataforma funciona de la manera similar a como opera Uber o Lyft. El usuario crea un perfil, el servicio utiliza la ubicación geográfica y se “pide” una caminata a una hora y día específico.
En función a estos parámetros se despliega una lista de posibles acompañantes que cobran desde 7 a 21 dólares por media hora de compañía.
El potencial de la soledad
Desde hace algunos se ha hablado mucho de la carencia de conexión social entre las personas, situación que, a decir de los especialistas, se deriva de las altas tasas de uso para plataformas digitales que han convertido a la soledad en una epidemia.
Aunque el debate sobre este ultimo punto no encuentra veredicto, lo cierto es que la soledad se ha convertido en un interesante negocio que promete grandes tasas de crecimiento impulsado, contrario a lo que podría pensarse, por las generaciones más jóvenes.
La aseguradora de salud Cigna utilizó una versión de la Escala de Soledad de UCLA el año pasado para encuestar a más de 20 mil adultos estadounidenses. Ahí encontró que casi la mitad dijo que a veces o siempre se sentían solos o excluidos.
Los más jóvenes, la Generación Z, eran los más solitarios, seguidos de cerca por la generación milenio. Sólo el 53 por ciento de todos los encuestados dijeron que tenían interacciones sociales significativas con persona a diario.