Aún cuando Twitter se mantiene como una de las marcas importantes del entornos social media, los números de crecimiento de la plataforma son lentos, si se consideran con otros espacios de interacción social.
Cifras entregadas por la propia compañía indican que, hasta el cierre del año pasado, la red social contaba con 400 millones de usuarios, quienes a decir de una infografía firmada por Lori Lewis, publican 481 mil tweets cada minuto.
Los números contrastan con lo registrado por WhatsApp, por ejemplo, aplicación que con más de mil 500 usuarios activos, tenía hasta 2013, un promedio de 835 mensajes recibidos y 417 mensajes enviados por persona.
En buena medida, estos números responden a la madurez del servicio, situación que obliga a la red social pensar en un cambio que no sólo prometa mantener el interés de los usuarios, sino también el de los anunciantes que son vitales para mantener la rentabilidad de su negocio.
En el último trimestre de 2018, Twitter reportó ingresos por 908 millones de dólares
Este podría ser el mayor cambio en 13 años
Con esto en mente, desde su blog oficial, la red social anunció una serie de cambios que prometen mejorar la salud de la plataforma y, como consecuencia, entregar una mejor experiencia a los usuarios.
Aunque los cambios son un avance, lo cierto es que parecen ser un movimiento muy tímido si se comparan con los grandes planes que, aparentemente, la organización tiene entre manos.
El día de ayer Jack Dorsey, CEO de Twitter, se presentó en el TED2019, y de acuerdo con un reporte de Axios, durante su intervención de su intervención, dio a conocer que la compañía está examinando centrar el servicio en temas de interés más que en los tweets y mensajes publicados por las cuentas.
EL cambio estaría enfocado en una de las grandes virtudes y valores que los usuarios ven en Twitter desde su nacimiento y hasta ahora. A diferencia de un medio convencional -sea digital o no-, una de las grande promesa de Twitter es que entrega al usuario sólo aquella información que es de su interés al permitirle seguir a un grupo de personas definidas por sus gustos y necesidades de información. En otras palabras, la plataforma entrega el control al usuario de lo que lee y la fuente de dicho contenido con base a las personas que decide seguir.
No más followers
Esto podría ser cosa del pasado, si los planes expuestos por Dorsey prosperan. El CEO de Twitter piensa que es mejor entregar a los suscriptores contenido en función de temas de interés y no con base en las personas que siguen, esto con el fin de eliminar sesgos y permitirles conocer más perspectivas sobre las temáticas que les interesan: “Creo que Twitter es una red basada en interés. Lo que podríamos hacer es permitirte seguir un interés, una tendencia, un hashtag o una comunidad. Esto nos da la oportunidad de mostrar todas las cuentas y todos los hashtags asociados con ello, lo que realmente abre la perspectiva que ves”.
Con un servicio centrado en temas de interés que permitan entender al usuario una problemática desde diferentes aristas sin que sean los gustos propios los que formen el criterio, el número de seguidores o la cantidad de “Me gusta” podrían perder validez como métricas dentro del servicio.
De Hecho Dorsey afirmo que “si tuviera que comenzar el servicio de nuevo, probablemente no enfatizaría tanto el número de seguidores. Pienso que incluso no crearía la función ‘Me gusta’, porque no creemos que impulse lo que ahora creemos que es lo más importante, aportes sanos a la red”.
Una gran oportunidad para las marcas
Si el nuevo modelo de Twitter propuesto por su fundador se llevará a cabo, las grandes ganadoras serían las marcas, ya que la segmentación de su publico sería mucho más precisa dentro de la plataforma, al tiempo que tendrían la oportunidad de llegar a nuevos mercados que quizá desconocen.
Las marcas están frente a un cliente que, desde muchos puntos de vista, puede definirse como agnóstico, cada vez más alejado de convencionalismos tradicionales en su búsqueda por reclamar su individualidad fuera de las reglas sociales que por décadas marcaron la pauta en los comportamientos, cubitos comunes y tradiciones de la sociedad.
Basta con reconocer que, de acuerdo con Trend Watching, el 19 por ciento de las personas que utilizan plataformas de economía colaborativa, tales como Airbnb, Uber o Ecobici las cuales se relacionan con usuarios jóvenes, son mayores de 55 años, mientras que en Reino Unido existe un mayor número de gamers mayores a 44 años que menores de 18 años.
De esta manera, aquellos rasgos que por momentos estuvieron definidos por aspectos como la edad, nivel socioeconómico o el género, por ejemplo, en la actualidad ya no se encuentran acotados por estos factores. Hoy los estilos de vida, personalidades, actitudes, valores e intereses de las personas son las que definen sus comportamientos.
Con una plataforma centrada en temas de interés y no en seguidores como la que propone Dorsey, las marcas podrían reconocer a sus públicos meta de valor con relativa mayor facilidad, al tiempo que serían visibles para usuarios con los que comparten intereses, pero para los que son desconocidas.