¡Shazam! Ésa es la palabra que suena a magia y que promete serlo para el Universo Extendido de DC Comics. Es el nombre del súper héroe que parece confirmar que DC Comics al fin ha encontrado la fórmula adecuada para sus películas inspiradas en súper héroes, luego de que Marvel les comiera el mercado y les diera la vuelta con el Universo Marvel, posicionándose como el universo fílmico de mayor relevancia, al estar por presentar su cinta número veintidós, “Avengers: Endgame”, en unos cuantos días. Antes de ello, los personajes de DC Comics (Supermán, Mujer Maravilla, Batman, Flash, entre otros) eran mucho más conocidos y populares de lo que hoy son Iron-Man, Capitán América y la Viuda Negra.
“Shazam!” es la séptima película del Universo Extendido de DC Comics que iniciara en 2013 con “El hombre de acero”. En aquel entonces la intención era emular la fórmula de Marvel al realizar una serie de película interconectadas entre sí, es decir, donde los personajes de una aparecieran en otras. Para darle un toque distintivo DC decidió inmediatamente enfrentar a Superman con Batman en su siguiente película, “Batman vs. Superman: El origen de la justicia” (2016), sugiriendo con ello ya la creación de “La liga de la justicia” y buscando establecer a su propio grupo de súper héroes, como sucediera con “Avengers”. El tono por el que se optó fue también mucho más obscuro, pretendiendo emular el éxito de la trilogía de “El caballero de la noche” que recaudó más de dos billones de dólares en taquilla y se hiciera, con “El caballero de la noche” (2008), la segunda entrega, de ocho nominaciones al Oscar, convirtiéndose en el primer filme en su género en ser considerado por los premios de la Academia reconociendo su labor en categorías aparte de los efectos visuales. Se llevaría dos estatuillas, Mejor Actor de Reparto, reconocimiento póstumo a Heath Ledger por su interpretación de El Guasón, y Mejor Edición de Sonido. Más allá de ello, a “El caballero de la noche” y “Wall-e”, estrenada el mismo año, se les considera como las dos películas que hicieron que la Academia cambiara la terna de Mejor Película, integrando un sistema que desde 2009 permite que el número de nominados varíe entre 5 y 10 películas y buscando con ello integrar una mayor variedad de cintas. A la modificación se le atribuye el que filmes como “Inception” (2010), “Mad Max: Furia en el camino” (2015) y este año “Black Panther” consiguieran ser incluidas, trayendo con ello diversidad y reconociendo que una película con gran atractivo comercial también puede tener sólidas bases artísticas y técnicas, y competir contra producciones de corte independiente y con tratamientos más “serios”.
Pero, mientras “Avengers” recibiera un 92% en el meta sitio Rotten Tomatoes, que promedia la opinión de críticos, “La liga de la justicia” apenas consiguió un 40%, con un consenso que señalaba personajes pobremente desarrollados, efectos visuales de baja calidad y una historia débil. La taquilla tampoco fue la esperada. “Avengers” costó 220 millones de dólares y consiguió poco más de un billón y medio. El presupuesto de “La liga de la justicia” se estima en 300 millones y apenas y lo duplicó, con 658 millones recaudados a nivel mundial. Es decir, mientras “Avengers” multiplicó casi por siete su inversión, “La liga de la justicia” apenas y recuperó pues recordemos que el presupuesto de producción de una película no incluye los gastos de mercadotecnia que pueden ir del 50% del costo de ésta a una suma similar al presupuesto. La respuesta del público tampoco fue tan distinta y explica justamente la diferencia entre lo recaudado por una y por otro. CinemaScore, líder en la industria que mide la reacción del público ante una película, en una escala donde A es lo mejor y F lo peor, reportó que “Avengers” obtuvo una A+ y “La liga de la justicia” una B+. En pocas palabras, DC Comics no estaba acertando en ninguno de los frentes, ni con el público, ni con la crítica y, desde luego, tampoco en taquilla. Y las cosas ya se veían mal desde antes: “El hombre de acero” (668 millones de un presupuesto de 225 millones, un 56% en RT y una A- de calificación) y “Batman vs. Superman” (873 millones de 250, 27% y B).
Aun así, DC lo siguió intentando. Con “Suicide Squad” los resultados también fueron mixtos (747 millones de 175, 27% y B+). Ello los llevó a replantearse toda la estrategia, cancelando, postergando y