El servicio de transporte bajo demanda Lyft, inició su segundo día de sesión en bolsa en el terreno negativo, puesto que diversos reportes de prensa indicaban que apenas unos minutos después de la apertura sus títulos caían en cerca del 11 por ciento para cotizar en un suelo de los 69.12 dólares por unidad.

Asimismo se reportó que en la primera media hora, la empresa daba signos leves de recuperación y sus papeles subían la cotización a los 70.40 dólares, cantidad todavía por debajo de los 72 dólares con los que arrancó su recorrido en Wall Street, y muy por debajo del tope que alcanzó el viernes pasado al ubicar las acciones en 87.24 dólares.

De acuerdo con un reporte de EFE los inversionistas apostaban desde el inicio por las ventas de los títulos de la tecnológica luego del arranque en la casa bursátil norteamericana, tras un tibio arranque el último día de la semana pasada que cerró con un ascenso del 8.74 por ciento menos de lo esperado por la expectativa generada.

Lyft fue la primera de las denominadas empresas “unicornios” que tienen una valoración por encima de los mil millones de dólares antes de cotizar en el mercado, a salir a bolsa este año, cuando se espera el debut de Uber, Slack o Pinterest.

Y es que a pesar de que consiguió una capitalización por encima de los 24 mil millones de dólares, los inversores mostraron sus dudas por una compañía que presenta interrogantes sobre la viabilidad de su modelo de negocio, ya que en 2018 perdió 911 millones de dólares con una facturación de 2 mil 200 millones.

Según la agencia, retomando la advertencia de diversos analistas, los inversores mostraban mayor interés por entrar en ofertas con mucha expectación para vender después rápidamente, algo que quedó demostrado en las primeras horas de este lunes.

Temor al interior.

No obstante, incluso desde la víspera a la salida a bolsa, la controversia ha acompañado a la firma de transporte ya que este episodio propició un temor a condiciones de trabajo más duras, así como las regulaciones que pudiesen llegar, así como una situación de huelga por parte de sus empleados.