“A mí nadie me dice que no”, “¿qué pasa? seguro tienes otro cajero que te gusta más”, “hazte cargo de lo que empezaste”, “dale, quédate, si la estábamos pasando bien”.
Estas son algunas de las respuestas que un cajero automático instalado en plena Ciudad de Buenos Aires les daba a los clientes cuando presionaban la tecla “No” en el display.
No era un error de sistema, ni un problema de software del ATM, sino que se trataba de una acción de street marketing del HSBC.
“No es no” es el título de la campaña que lanzó el banco de origen británico contra la violencia de género y que se viralizó en las redes sociales a partir de una más que interesante idea para hacer ver el problema a través de una acción muy común: extraer efectivo de un cajero automático.
La intención de la marca es exponer que el “no” debe ser comprendido como lo que es: un “no”.
“A mí nadie me dice que no”, se leía en la pantalla del dispositivo cuando los clientes deciden no realizar ninguna otra operación al comprobar que está fuera de servicio.
En las redes sociales, especialmente en Twitter, muchos destacaron la creatividad de la marca (obra de David) y las buenas intenciones al comprometerse con una causa como lo es la violencia de género.
Debe ser la mejor publicidad de una empresa privada contra la violencia de género (va completo) ? pic.twitter.com/hqMwT53Cko
— Diego Batlle ? (@dmbatlle) 10 de marzo de 2019
Otros, sin embargo, criticaron la comparación que se hace entre la mujer y el cajero automático, un detalle que no resulta menor para buena parte de los ayudaron a viralizar el spot en las redes sociales.
Aunque me parece que la activación del cajero de @HSBC_AR tiene mucho para revisar y replantear, creo que sí una marca va a hacer femvertising y tener el tupé de apropiarse de un lema de la lucha feminista como “No es no”, tiene que poder responder estás preguntas??
— pau/chin/pum (@pauchinpum) 10 de marzo de 2019
Desde publicitarias.org, un colectivo de mujeres que trabaja en agencias y busca promover la diversidad en la industria del marketing, el diseño y la comunicación, publicaron: “Consideramos que la apropiación de frases de la lucha feminista (“No es no”) por parte de las marcas es algo peligroso que requiere de una coherencia con las accione de la empresa”.
Y se preguntaron: “¿Qué hace HSBC por las mujeres los 365 días del año? ¿Cómo es la situación de las mujeres en la industria bancaria? ¿Cuántas mujeres hay en puestos directivos dentro del banco? ¿Cómo son las demás comunicaciones de HSBC?”.
Respecto a la acción de HSBC para el #8M:
Entendemos que hay muchas personas a quienes les gustó la publicidad y es completamente válido, pero acá les compartimos algunos puntos a analizar como consumidores y marcas ?— Publicitarias.org ? (@publicitariastw) 10 de marzo de 2019
La activación se enmarcó en las acciones por el Día Internacional de la Mujer, el pasado 9 de marzo.
Eric Zampieri, ilustrador argentino, opinó en LinkedIn: “No se establece una comparación. El cajero es un medio para el mensaje, realizando un ‘microabuso’. Vos, el usuario, asumís el papel de una mujer víctima indefensa, ya que estás preso de una situación incómoda. En este caso la tarjeta retenida es el medio de dominación. El ticket final con el mensaje es un broche de oro”.