Una de las figuras que destacó por su presencia en la alfombra roja de los Premios Oscar fue Latin Lover, celebridad mexicana que estuvo en la ceremonia de premiación gracias a su breve participación dentro de la cinta Roma, dirigida por Alfonso Cuarón.
En el mercado mexicano, la presencia del ex luchador ganó rápidamente relevancia para convertirse en una tendencia que se mantuvo durante la primera parte de la gala, al generar -en tan sólo 100 tweets- cerca de 5 millones 161 mil 450 impresiones con un total de 4 millones 499 mil 560 cuentas alcanzadas, según cifras de Tweetreach.
Mediante las stories de Instagram, este personaje puso sobre la mesa un tema que resulta interesante al revelar el costo que tiene asistir a la noche más esperada del séptimo arte.
Desde su perfil oficial en la menciona red social, Lover publicó una imagen en la que se aprecia el pase de acceso personalizado del actor, en donde se puede leer que el costo por entrar al “gran teatro” es de 2 mil 250 dólares.
Acudir a la gala de los Oscar no siempre es mediante una invitación; algunos de los asistentes tienen que pagar su boleto para estar en una de las noches más aclamadas por la industria cinematográfica a nivel mundial, y la publicación de Latin Lover descubre que el precio por ser parte de dicho glamour es de 43 mil 134 pesos.
El negocio detrás de los Oscar
El pago realizado por el mexicano, sólo es parte de un negocio mucho más amplio que gira alrededor de los codiciados premios de la Academia. Según un estudio firmado por Micronomics, la Academia de Cine de Estados Unidos destina cada año cerca de 26 millones de dólares en la preparación del evento, tarea que contempla el alquiler del teatro así como el pago de todos los empleados detrás del escenario (desde los presentadores a los artistas invitados, hasta los camareros, asistentes y personal de seguridad).
Esta cantidad no es fija. De hecho se cree que el número puede dispares hasta los 100 millones de dólares si se considera la víspera de la gran noche y todos los eventos relacionados a dicho momento.
El negocio que los Oscar mueven va más allá de la “gran noche”. los ingresos que las piezas nominadas generan antes y después de la gala son abrumadores. De acuerdo con una investigación realizada por la UCLA, una película que consigue cinco nominaciones, puede lograr en taquilla hasta 68 millones de dólares más que otra que no tiene ninguna nominación. De hecho, se estima que cuando se anuncia la nominación los ingresos suben casi 16 millones de dólares.
La publicidad tiene un gran rol
Llegar al banquillo de los nominados no es fácil y las casa productoras invierten grandes cantidades de recursos para mejorar las garantías de éxito de sus piezas. A decir de la fuente antes citada, las películas nominadas en los últimos años destinaron un presupuesto promedio de 17 millones de dólares en materia de promoción para llegar a competir por uanestatuilla.
A esto se suma lo que muchos estudios pagan a un grupo selecto de publicistas y analistas para conseguir que ciertos filmes sean nombrados en la “mágica noche”; este concepto acapara un presupuesto que va de los 10 mil a los 20 dólares, según la BBC.
Netflix fue claro ejemplo de esto al invertir en publicidad, según un artículo publicado por The New York Times, entre los 25 y 30 millones de dólares, mientras que Warner Bros. habría gastado unos 20 millones de dólares en promocionar la cinta “Ha nacido una estrella”.
De esta manera, no resulta extraño que los espacios publicitarios durante la transmisión de la gala alcancen cifras que se asemejan a las del Super Bowl.
Durate 2016, la BBC, cadena que tuvo los derechos de transmisión de los Oscar, ingresó 100 millones por concepto de publicidad, con lo que se estima que aquellas marcas que desean aparecer en los Oscar pagan cerca de 2 millones 300 mil dólares por su anuncio.