Apostar a las criptomonedas basadas en cadenas de bloques (blockchain) como el Bitcoin fue una gran idea en 2017, cuando llegó a tocar los 20.000 dólares.
Sin embargo, en 2018, fue una decepción.
Cada Bitcoin cotizaba en enero de 2018 a 12.728 dólares. Un año después, su valor de venta es 3.490, un 72% menos.
En este contexto de caída, más daño provocó un nuevo informe publicado esta semana por JPMorgan sobre blockchain, la tecnología detrás del éxito de las criptomonedas.
El JPMorgan resalta que no es probable que las cadenas de bloques transformen el sistema de pagos global y dice que lo que sí puede ocurrir es que el blockchain tenga potencial para simplificar procesos bancarios engorrosos, como el financiamiento comercial.
“Puede proporcionar mejoras marginales a varias partes del proceso”, señala el informe, sin destacar las virtudes que ven los más entusiastas defensores de las blockchain.
Para muchos, incluso en Wall Street, esta tecnología será transformadora para el mundo financiero e insisten en que desafiará a las instituciones de pago tradicionales, como Visa o Mastercard, incluso a los propios bancos.
De hecho, hay miles de millones de dólares de fondos de riesgo invertidos en startups que avanzan en desarrollos de blockchain y compañías como Facebook, IBM y Accenture a contratar especialistas en el tema.
Según Bloomberg, “el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, el presidente del segundo banco más grande de España, BBVA, y la consultora McKinsey & Co, dijeron que la tecnología de las blockchain es inmadura y necesita un mayor desarrollo para revolucionar verdaderamente la economía global.
Entre los argumentos, JPMorgan cita dos:
- En primer lugar, porque el sistema de pagos actual ya está altamente digitalizado.
- Por otro, porque un sistema impulsado por las blockchain es inverosímil con las actuales restricciones regulatorias.
Por el contrario, el banco entiende que el verdadero potencial de las blockchain radica en su capacidad para automatizar procesos bancarios engorrosos, como la financiación comercial, que será la más beneficiada.
No es poca cosa, la industria tiene un valor de US$ 2.000 millones y representa el 15% del comercio mundial, según el informe.
Además, JPMorgan pone en duda el verdadero valor de las criptomonedas como el Bitcoin como activos para diversificar carteras de inversiones y protegerse contra los riesgos del mercado.
El Bitcoin está en caída libre y el mercado de las criptomonedas en general perdió un alrededor del 85% en valor desde su punto máximo a comienzos de 2018.
Según el informe, en medio de la tendencia bajista, la participación de las instituciones financieras se redujo y quedaron los inversores minoristas y las pequeñas empresas dominando el mercado de criptomonedas.
Regulaciones
Los controles de los estados iban a llegar en algún momento para socavar la “libertad” de las criptomonedas.
Por ejemplo, Japón, Corea del Sur y Estados Unidos son sólo algunos de los países que ya analizan gravar las utilidades obtenidas en estas inversiones, así como exigir la identificación de las personas y la verificación del origen de los fondos invertidos.
Todo eso golpeó en la cotización del Bitcoin a lo largo de 2018.
Más allá de esto, “desarrollador de blockchain” es uno de los trabajos que más se demandará este 2019, según un reporte de la BBC.
Se trata del segundo campo más demandado en este año (después de especialistas en ciberseguidad).
Desde LinkedIn se dice que la demanda de desarrolladores de blockchain ha aumentado 33 veces durante el último en Estados Unidos.