El mismo día que Jaguar Land Rover anunciará el recorte de unos 5.000 empleos en sus fábricas del Reino Unido, el mundo automotriz del Viejo Continente se desayunó con otra mala noticia: Ford dio a conocer un plan de austeridad que incluye despidos, cierre de plantas, revisión de alianzas y el fin de la producción de algunos de sus modelos.
El objetivo: aumentar la rentabilidad de la compañía en un escenario de dudas respecto de lo que sucederá en 2019, ante la caída generalizada en las ventas.
La empresa automovilística de origen estadounidense, que cuenta con unos 53.000 trabajadores en el Viejo Continente, no dio cifras concretas sobre el número de empleos que reducirá. Sin embargo, sí explicó en el comunicado que fue dado a conocer este jueves que “las mejoras en los costos estructurales se apoyarán en la reducción del superávit laboral en todas las funciones”.
Según Ford, para reducir esos costos laborales “en la medida de lo posible” se recurrirá a “bajas voluntarias” y se trabajará “estrechamente con interlocutores sociales” en cada ciudad que esté involucrada.
Entre las medidas concretas que sí anunció están:
- El cierre de la planta de cajas de cambios de Burdeos (Francia), en agosto próximo. Allí tiene unos 850 empleados.
- Otra medida es la “revisión” de la actividad en Rusia, en una joint venture con la local Sollers.
- Además, dijo que fusionará las sedes de Ford UK y de Ford Credit en Dunton, Essex (Reino Unido).
- Y confirmó que no fabricará más los modelos C-MAX y Grand C-MAX en la planta de Saarlouis (Alemania).
La empresa no menciona en el comunicado qué hará con la planta que tiene en Valencia, España, ni si habrá cierres en otras factorías, como las de América latina.
En baja
Ford Europa reportó una pérdida de US$ 282 millones (sin contar intereses ni impuestos) en el tercer trimestre de 2018, dice Reuters.
En este continente tiene 15 plantas, incluyendo dos de producción de motores en el Reino Unido, en Bridgend y Dagenham.
La compañía dio a conocer que está en conversaciones con los sindicatos, y aún no tiene una cifra sobre la cantidad de empleos afectados, pero Armstrong dijo que era “seguro decir que serán miles” y que “será un impacto significativo en los números de empleos”.
Armstrong añadió que de concretarse el Brexit sin un acuerdo obligaría a la empresa a realizar recortes más profundos aún. “Si el resultado es malo, entonces esperamos que las consecuencias sean significativamente más dramáticas”, dijo.
Ford tuvo pérdidas en Europa en los últimos dos años, con dificultades por el tipo de cambio, la caída en las ventas de los carros diésel y un debilitamiento general del mercado.
Hace dos años, General Motors se retiró de la región después de acumular dos décadas de pérdidas en su división Opel-Vauxhall, que vendió a PSA, el propietario de Peugeot.
Los recortes, que también afectarán a los centros de investigación, harán que Ford reduzca la cantidad de modelos en oferta para enfocarse en las áreas más rentables del mercado.
En los Estados Unidos, el grupo ya se retiró del mercado de los vehículos de pasajeros para centrarse en los utilitarios deportivos, camionetas pick-up y el deportivo Mustang.
Ford reestructurará su brazo europeo en tres segmentos: vehículos comerciales, automóviles de pasajeros y vehículos importados de los Estados Unidos, dice el Financial Times.
Alianza con VW
En paralelo, el grupo planea trabajar con Volkswagen en la producción de vehículos comerciales bajo una sociedad que se anunciará formalmente la próxima semana.
Según Reuters, ambas automotrices revelarán una alianza amplada que va más allá de cooperar en vehículos comerciales, en un movimiento destinado a ahorrar miles de millones de dólares.
“Se espera que se anuncie una alianza global”, le dijo una de las fuentes a la agencia de noticias, agregando que el pacto se dará a conocer el próximo martes, durante el auto show de Detroit.
