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En 2018 las salas de cine recaudaron más de 41 mil 700 millones de dólares a nivel global.
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Avengers: Infinity War y Black Panther son dos de las más taquilleras.
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Bird Box y ROMA no compiten en taquilla, pero no dejaron de ser fenómenos mundiales.
No es nuevo hablar de la distancia que existe entre Netflix y Hollywood o, al menos esa impresión se proyectado, pues pese a que muchas de las grandes productoras permiten la distribución e incluso han colaborado para la producción de contenidos, a la compañía de Los Gatos, California se le ha marginado de los grandes eventos de la industria cinematográfica.
¿Por qué se da esta ‘enemistad’? Aunque ya lleva varios años, podríamos citar el primer gran cisma en 2017 cuando Okjia se presentó en el Festival de Cine de Cannes, pero sólo para exhibición, no para contender por alguna distinción.
Desde entones, las críticas por algunos directores -Pedro Almodovar y Steven Spielberg, entre ellos- que rechazan la presencia de Netflix en los principales eventos como Cannes, Los Oscar, Berlinale, entre otros, se ha profundizado.
Esto ha llevado a pensar que existe una disputa (no abierta) entre ambos modelos de negocio que competirán en algún punto por las audiencias.
Sin embargo, esto no necesariamente será así, Hollywood, así como otros grandes mercados como Europa y Asia seguirán siendo rentables y conquistando al público, y, si bien Netflix no puede ser vista como una productora de cine, no quiere decir que no produzca contenidos que cumplan muchos de sus aspectos importantes: visión artística y entretenimiento.
Aquí algunos datos que constatan la rentabilidad del cine
1. De acuerdo con datos de Comscore, sólo pro concepto de taquillas, la industria cinematográfica recaudó más de 41 mil 700 millones de dólares a nivel global.
2. Estados Unidos, sin duda una de las grandes potencias en este mercado, revalida su posición al recaudar más de 11 mil 900 millones.
3. Disney se ubicó como la principal productora al acaparar el 27 por ciento de la taquilla global. Sabemos de su músculo y pese a tener fracasos como A Wrinkle in Time y Solo: A Star Wars Story, las aplanadoras de Avengers: Infinity War y Black Panther que incluso podría contender por un Oscar, dan crédito de su poder.
4. Este comportamiento se refleja en otros mercados, en España, por ejemplo, datos de la misma fuente citada por el Instituto de Cinematografía y las Artes Audiovisuales (ICAA) refieren que las taquillas españolas acumularon más de 118 millones de dólares, destacando que es el primer año que registran un crecimiento, después de cuatro años de no hacerlo y, sobre todo, con una gran afluencia de audiencia a producciones españolas.
5. México no escapa de esta tendencia, ya que en 2018 se recaudaron más de 56 millones de dólares en taquillas (consideremos las economías y tamaños de mercados). En este caso, se destaca un récord de asistencia a salas con más de 23 millones de personas.
Estos son sólo algunos datos de lo que representa la industria cinematográfica y que demuestran que no está en peligro pese a que el Video Streaming (SVoD) -que el año pasado representó ingresos superiores a los 20 mil millones dólares, según datos en Statisa- no para de crecer.
Sí, Netflix a encontrado un cierto equilibrio entre ofrecer películas que están bien construidas como Bird Box, Okja, Gerald’s Game, Ícarus y Tallulah, o ROMA, de Alfonso Cuarón que junto a la producción protagonizada por Sandra Bullock han sido sus más recientes ‘fenómenos globales’.
La industria del cine seguirá existiendo por mucho tiempo, no se trata de una disputa de qué formato es mejor que otro, sino de la experiencia que el espectador puede disfrutar con cada uno de ellos; en ambos casos, la clave para mantener la atención y el gusto del público siempre será la de siempre… contenidos, historias y producciones de calidad.