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Nacidos entre 1995 y 1997, la Generación Z poco a poco está adentrándose en el mercado laboral actual.
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El 37 por ciento de miembros de la Generación Z busca trabajar para una PyME, mientras que el 29 por ciento busca su primer trabajo con un empleador más grande.
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Las PyMes están contratando más personas que nunca. El problema es que tienen la misma dificultad para reclutar talento nuevo, que las compañías más grandes. La pregunta es ¿Cómo van a convencer a la generación Z para que se unan a ellas?
En estos días, la economía empresarial se basa en la fortaleza y la resistencia de las pequeñas y medianas empresas. Si bien las PyMes son más pequeñas en tamaño que sus contrapartes corporativas, tienen una gran influencia económica en el mundo empresarial, en términos de empleo y niveles ingresos.
Esto está respaldado por estadísticas importantes. De acuerdo con el informe Documentos -Pequeñas y Medianas Empresas PyMEs 2018- de la Secretaría de Gobernación, en México existen 4.2 millones de unidades económicas, de las cuales 99.8 por ciento son consideradas como pequeñas y medianas empresas.
De acuerdo con el Consejo Internacional para la pequeña empresa, este tipo de negocios, sin importar que pertenezcan al comercio formal o informal de la economía de un país, representan 90 por ciento del total de las empresas, por lo que generan entre 60 y 70 por ciento de los empleos en un país, y son las responsables de 50 por ciento del PIB a nivel mundial.
Las cifras de empleo de las PyMEs son impresionantes y se estiman en 16,1 millones de personas, una cifra que ha aumentado en un 3 por ciento de forma anual desde 2016.
Según una investigación del banco Santander, las pequeñas y medianas empresas han contratado a tres veces más personas que las grandes corporaciones en los últimos cinco años. Su ritmo pronostica que puedan superar a las grandes empresas para el 2030.
¿Las PyMEs tienen buenas perspectivas de empleo para las nuevas generaciones?
Las estadísticas muestran que, en términos de rotación y niveles de empleo, las PyMEs parecen estar preparadas para hacerse cargo de las nuevas generaciones. El detalle que se debe analizar es que la próxima generación de personas que ingresan al mercado laboral buscan satisfacer sus necesidades.
Una encuesta realizada por Prospects, una organización de carreras graduadas del Reino Unido, preguntó a más de 9,000 estudiantes sobre sus intenciones de trabajo durante los próximos 12 meses. La respuesta: el 37 por ciento de ellos dijo que quería trabajar para una PyME, mientras que solo el 29 por ciento dijo que quería comenzar su primer trabajo con un empleador más grande.
Actualmente, la próxima generación que entrará al mercado laboral es la Z. Nacidos después de 1997, se caracterizan porque sus necesidades tienen otro tipo de cultura empresarial: apoyo.
Generación Z y su experiencia laboral
Sin embargo, sus experiencias y demandas son únicas: buscan la flexibilidad de poder cambiar sus procesos internos. Y muchas PyMEs tienen características únicas que las hacen atractivas para los empleados.
Esto significa que con menos tiempo y esfuerzo, pueden hacerse más relevantes y más atractivos para la generación Z, quienes pronto inundarán el mercado laboral.
Tips para llegar a las nuevas generaciones
Para atraer a esta nueva generación, se deben entender qué es lo les motiva y qué valoran en una empresa. Esto va más allá del rol que asumirán como empleados. Si bien hay cruces entre lo que buscan los millennials en un puesto de trabajo y lo que demanda la generación Z, hay algunas diferencias clave que hay que tener en cuenta.
Extras
Han sido testigos de algunos eventos financieros importantes, incluida la recesión mundial y el aumento de las tasas universitarias. A medida que esta generación ingresa al mercado laboral, es probable que estén buscando empleos pagados competitivamente, que ofrezcan extras adicionales. En otras palabras, quieren “más por su tiempo y esfuerzo”.
Estos “extras” pueden variar desde la cobertura de atención médica (para empresas con un poco más de dinero) hasta descuentos en otros servicios, como gimnasios.
Beneficios digitales
A medida que esta generación ha crecido con Internet, los esquemas de incentivos para empleados sean fácilmente accesibles a través de computadoras y dispositivos móviles.
En un momento en el que el bienestar de los empleados y el equilibrio entre la vida laboral y el personal son cada vez más importantes, es importante asegurar que una empresa comunique sus planes de bienestar de una manera clara en estos canales.
Salud, una prioridad
Para las empresas más pequeñas que no cuentan con las facilidades financieras para brindar cobertura médica, tener una cultura de apertura y consideración en lo que respecta a la salud mental de los empleados y los problemas personales generará un entorno de trabajo atractivo.
Es importante recordar que las Generación Z está generalmente más comprometidas con su salud mental colectiva. Por lo tanto, la comunicación de estas políticas debe comenzar en el nivel de gestión y se debe atender como una política de la compañía.
Esto asegurará que los empleados de Gen Z sepan que está tomando en serio sus consideraciones y que está incorporando valores en el tejido de su negocio.
“Ventajas” continuas
La generación Z es exigente, así que no debes dejar que te acusen de ofrecer falsas promesas. Para asegurarse de que esto no suceda, dedica el tiempo necesario para elaborar una política de bienestar de los empleados a largo plazo.
Esto puede incorporarse al esquema de “beneficios” que hay en otros eventos regulares. Los gastos a corto plazo y el tiempo que lleva la planificación de estos eventos ofrecerán beneficios en términos de asegurar una reputación benevolente como empleador, así como aumentar el bienestar y la productividad de su fuerza laboral actual.
Experiencia de empleado “personal”
Esto incluye dejar en claro que la PyME se preocupa por su desarrollo profesional. Haz que este punto sea obvio desde el momento en que publicas el puesto de trabajo en línea y recuerda constantemente a los candidatos que esta es una prioridad.
Esto también debería alentar la lealtad a la empresa, ya que los empleados se sentirán más valorados. Esta generación es más sensible y está en sintonía con los sentimientos tanto en el hogar como en el mundo del trabajo.